La tormentosa relación entre Ozzy, el autoproclamado “Príncipe de las tinieblas” y su princesa, Sharon, resultó ser una verdadera historia de amor a prueba de infidelidades, adicciones y vittolencia.
Ambos fueron testimonio de la frase “hasta que la muerte nos separe”, pues estuvieron juntos desde su boda en 1982 –a pesar de que en 2016 anunciaron su separación que duró poco tiempo– hasta el pasado 22 de julio, día en que el líder de Black Sabbath dio su último aliento.
El cantante de heavy metal sufrió un infarto del miocardio, luego de unos días de haber dado su último concierto (5 de julio), y alcanzado los 43 años de matrimonio con su esposa y mánager (4 de julio). “Sharon es mi alma gemela. A veces la amo, otras veces no, a veces me enojo, me vuelve loco, o me pongo celoso. Pero, al final del día la amo más que a todo en este mundo. No podría vivir sin ella”, declaró Ozzy a una oyente sobre las cualidades que cada uno admira del otro, en su pódcast The Osbournes. Sharon, por su parte, admiró “su sentido del humor. Siempre me hacía reír, hasta el día de hoy, incluso en los momentos más duros, él encontraba la manera de hacerlo”.
Destacó la honestidad de su esposo, “pues nunca aparentó ser otra persona, inclusive siendo famoso.” Así, a lo largo del episodio, Ozzy & Sharon’s True Love Story (La verdadera historia de amor de Ozzy y Sharon), ambos respondieron de manera honesta y relajada a las preguntas de oyentes.
La música los unió
El inicio de la relación se dio gracias a que en 1970, el grupo Black Sabbath estaba en la búsqueda de un mánager, y solicitaron los servicios de Don Arden, padre de Sharon. Sin embargo, no fue inmediato el comienzo de su romance y a pesar de que Ozzy y Sharon siempre se encontraban en aeropuertos o conciertos, comenzaron a salir recién 9 años luego de la expulsión del cantante de su grupo Black Sabbath. Fue en ese tiempo de pareja cuando Sharon asumió la representación de Ozzy como solista por más de 40 años.
Tres años después, se casaron, solo meses después del divorcio de Ozzy de su primera esposa; al año siguiente ya dieron la bienvenida a su hija mayor Aimee. Le siguieron de manera consecutiva, Kelly y Jack, quienes tienen la diferencia de un año de edad.
El doble trabajo de manejar la carrera de su esposo y la crianza de los chicos fue todo un desafío para Sharon que contra todo pronóstico, supo capear y consiguió llevar con éxito la carrera y rehabilitación de su marido.
Inclusive, logró formar su propia compañía Sharon Osbourne Management, representando a artistas como Gary Moore, Motörhead, The Smashing Pumpinks, entre otros destacadis artistas.
Fue ella la creadora y productora ejecutiva del exitoso reality show de MTV, The Osbournes, emitido en 2002 y que tuvo cuatro temporadas. El reality, sin embargo, no contó con la participación de la hija mayor del matrimonio, quién decidió alejarse de las cámaras y mantener un perfil bajo. El programa fue tan popular que muchos seguidores de los Osbournes siguen creyendo que la familia solo se compone de cuatro integrantes.
En la salud y la enfermedad
Sobre los momentos más difíciles que la pareja tuvo que atravesar, Sharon contestó que luchar contra la adicción al alcohol de Ozzy fue una dura tarea pero que, “gracias a Dios ya no tenemos que lidiar con eso hoy en día”, expresó en el mencionado pódcast.
“No existe el felices para siempre. El matrimonio es el contrato más duro que puedes obtener”, sostuvo Ozzy en un momento del pódcast. Por su parte, su fiel compañera afirmó: “Cuando las personas dicen, ‘nuestras carreras nos separaron’; se supone que eso es solo una parte de tu vida, en cambio el matrimonio es para toda la vida”. Seguidamente, Ozzy coincidió con su esposa con la frase: “Hasta que la muerte nos separe”.
Definitivamente, Sharon es un ejemplo de constancia, pues fue ella la se llevó la peor parte de su matrimonio. En 2016, la pareja estuvo a punto del divorcio, por una supuesta infidelidad del cantante con una estilista. Sin embargo, se reconciliaron al poco tiempo e inclusive hicieron una renovación de votos.
Pero, aunque Ozzy parezca el villano de la película, a lo largo de su matrimonio supo demostrar el amor que tenía por Sharon y estuvo presente en los momentos mas duros para ella. “Recuerdo que cuando estuve enferma de cáncer solía cargarme cada vez que necesitaba ir al baño”, dijo ella. “Eso es lo que haces, no lo piensas dos veces”, aseguró él.
“En estos últimos cinco años fui una verdadera molestia para mi familia”, sentenció Ozzy con relación a su enfermedad de Parkinson y la última cirugía de la columna que se realizó en 2019, tras una caída que lo dejó con notoria dificultad en la movilidad. “Pero, ellos fueron maravillosos”, sostuvo el ícono del metal, refiriéndose al apoyo que recibió de su familia en ese tiempo.
Renovaron su amor
En otro momento del pódcast, Sharon agregó que su marido siempre fue romántico, y que acostumbraba llevarle el desayuno a la cama con flores que recogía de su jardín. De hecho, estos gestos de cariño pudieron ser vistos en público en repetidas ocasiones, como lo fue en el programa de The Talk, donde su esposa estuvo como copresentadora.
En el recordado episodio, el metalero ingresó al set con el tema Crazy Train de fondo, un ramo de flores y un regalo, sorprendiendo a su señora en su cumpleaños. Este evento, según Entertainment Tonight, ocurrió poco después de la mencionada separación y fue interpretado como un acto de compromiso del cantante con su esposa, quién lo perdonó ante el público.
Aunque en 2003, la pareja ya había renovado sus votos, nuevamente en 2017 fue que el matrimonio decidió renovar sus votos en Las Vegas. Para Ozzy, esta segunda renovación fue como el verdadero día de su boda tras superar la crisis del año anterior. “Esta es la que voy a recordar”, dijo a la revista Hello Magazine, en una entrevista, en donde también expresó: “Sharon y yo pasamos por mucho, y esto se siente, honestamente como un nuevo comienzo”.
