El amor del Señor por nosotros: Un amor grande que nos nutre de sí mismo; un amor gratuito, siempre a disposición de toda persona hambrienta y necesitada de regenerar las propias fuerzas. Vivir la experiencia de la fe significa dejarse alimentar por el Señor y construir la propia existencia no sobre los bienes materiales, sino sobre la realidad que no perece: Dones de Dios, su Palabra y Cuerpo.
“Jesús es el Pan de Vida de nuestras familias, Él quiere estar siempre presente alimentándonos con su amor, sosteniéndonos con su fe, ayudándonos a caminar con su esperanza, para que en todas las circunstancias podamos experimentar que es el verdadero Pan del cielo”.
Extractamos frases de San José María Escrivá: “Buscas la compañía de amigos que con su conversación y su afecto, con su trato, te hacen más llevadero el destierro de este mundo..., aunque los amigos a veces traicionan. -No me parece mal-. Pero... ¿cómo no frecuentas cada día con mayor intensidad la compañía, la conversación con el Gran Amigo, que nunca traiciona?
(Frases de https://es.catholic.net y https://odnmedia.s3.amazonaws.com).