Nuevamente los senadores están en el ojo de la tormenta debido a denuncias sobre el uso indebido de influencias.
Apenas pasó una semana de la grave acusación sobre supuesto soborno contra el colorado Juan Carlos Galaverna, ahora salta una denuncia contra Martín Arévalo por tráfico de influencias.
Fue el propio titular del Congreso, Óscar Salomón, quien hizo una acusación contra Calé, quien supuestamente recibía USD 100.000 de Horacio Cartes a cambio de “favores políticos”.
Cachito había tratado de mercenario político a su correligionario, e incluso anunció con bombos y platillos que haría una denuncia en la sesión del Senado.
Al final, en el transcurso de la semana pasada se limitó a cumplir con sus actividades oficiales, y luego viajó rumbo a Corea.
En la Cámara Alta se mencionaba la posibilidad de aplicar la suspensión a Calé, y hasta se mencionaba una posible pérdida de investidura.
Sin embargo, hasta el momento quedó en el limbo, como una simple confrontación política colorada.
Como broche de oro, fue salvado el titular de Conajzar (Comisión Nacional de Juegos de Azar), José Antonio Ortiz Báez, quien había sido el motivo de la disputa que se dio entre Galaverna y Salomón.
Contrabando. En el caso de Arévalo, una supuesta denuncia sobre el robo de cargamento en Aduanas por un valor de USD 3 millones hizo explotar una nueva bomba.
Llamativamente, el colorado resolvió hacerse cargo personalmente del caso, y el titular de Aduanas, Julio Fernández, lo denunció ante la Fiscalía por el uso indebido de sus influencias.
Además, reveló varias conversaciones que mantuvo con el parlamentario abdista, en el que el mismo le solicita cargos para sus allegados.
Arévalo negó que haya solicitado algún pedido indebido, y recordó que antes lo visitaba en su oficina en el Senado y rezaban juntos.
Otra vez, algunos senadores consideran la posibilidad de un desafuero, o incluso una pérdida de investidura, sujeta a los resultados de la investigación de la Fiscalía.
Sin retorno. A varios les costó el cargo en el Senado el tema del uso indebido de influencias, comenzando con el colorado Óscar González Daher, y Jorge Oviedo Matto, del Unace. En ese orden, fueron quedando sin bancas Víctor Bogado (ANR), Dionisio Amarilla (PLRA), Paraguayo Cubas (Cruzada Nacional).
Además, María Eugenia Bajac (PLRA) y Mirta Gusinky (ANR). Los que se salvaron fueron Javier Zacarías Irún y Rodolfo Friedmann (ANR); y Sixto Pereira (Frente Guasu).
Soborno
Acusación. El presidente del Congreso, Óscar Salomón, había acusado, hace una semana atrás, a Calé Galaverna de haber recibido, mensualmente, USD 100.000 del empresario Horacio Cartes, durante su gobierno, a cambio de “favores políticos”.
Pedido de cargos
Denuncia. El presidente de Aduanas, Julio Fernández, presentó una denuncia ante la Fiscalía contra Martín Arévalo por supuesto uso indebido de influencias, alegando que el mismo le solicitaba cargos. Arévalo dijo que Aduanas robó un cargamento ajeno.
