En todos los países de Latinoamérica, entre ellos Brasil, México, Cuba, y Argentina se adaptan a los tiempos que se imponen con la presencia el Covid-19.
BRASIL. La Confederación Nacional de Obispos de Brasil, el país con más católicos del mundo (unos 120 millones), pidió oficiar las misas a puerta cerrada y transmitirlas por TV, radio y redes sociales.
Además se suspendieron tradiciones centenarias y muy populares, como procesiones de la Pasión de Cristo y el rito de lavado de pies practicado el Jueves Santo, así como el montaje de tapices gigantes de aserrín en las calles de la ciudad colonial Ouro Preto (Minas Gerais).
El evento más importante de la Semana Santa en México, la procesión y representación de la pasión de Cristo en la localidad de Iztapalapa, se realiza hoy y mañana sin los dos millones de visitantes que suele reunir cada año. El acto, en el que participan 4.000 personas, será televisado en canales públicos.
Debido a la pandemia, por primera vez en 60 años de revolución, el Partido Comunista de Cuba ha permitido transmitir las principales ceremonias y ritos religiosos de Semana Santa en la radio y televisión del Estado.
Ante la cuarentena vigente, la Iglesia católica invita a celebrar una “Semana Santa desde casa” mediante transmisiones en Instagram y Facebook, un plan dificultado por la intermitencia de la conexión a internet y los apagones, especialmente en el interior del país.
El tradicional Vía Crucis que se realiza cada año en Buenos Aires (Argentina) y que culmina con una misa en la Catedral, frente a la histórica Plaza de Mayo, fue cancelado. En su lugar, el arzobispo Mario Poli celebrará una misa de Pascua sin fieles que será transmitida por televisión y streaming.
La Iglesia llamó a sus fieles a “la creatividad” ante las medidas de confinamiento.
120
millones de católicos se estima que tiene Brasil, el país con más seguidores de esta religión en el mundo.