La defensa de Rivas había pedido sustanciar varias pruebas antes de la audiencia preliminar, según dicen, para basadas en ellas, solicitar el sobreseimiento definitivo de Rivas, acusado de supuestos hechos de estafa y cobro indebido de honorarios.
El juez Florentín resolvió que serían estudiados en la preliminar. Esto fue apelado ante el magistrado, que rechazó el pedido, por lo que el caso pasó al Tribunal de Apelación, que confirmó la cuestión.
Después, los camaristas sacaron una aclaratoria del fallo. Contra estas dos resoluciones, la defensa de Rivas planteó una acción de inconstitucionalidad ante la Corte.
Con esto, pidieron la semana pasada suspender la audiencia preliminar, pero el juez rechazó el pedido, con lo que esto fue finalmente apelado otra vez, y ahí lograron suspender la diligencia.
Florentín sostuvo que la acción de inconstitucionalidad no suspende el proceso, salvo que sea una sentencia definitiva o un auto interlocutorio con fuerza de tal.
Ahora, será el Tribunal de Apelación el que estudie de nuevo el recurso de la defensa de Tomás Rivas, que con ello, logró suspender por cuarta ocasión la audiencia preliminar del legislador.
Anteriormente, la defensa había planteado distintos recursos que pararon la preliminar en tres ocasiones, por lo cual el fiscal Piñánez pidió que Rivas sea declarado litigante de mala fe y sea sancionado por el juzgado.
Hay que recordar que el caso fue iniciado a raíz de las publicaciones de ÚH, que revelaban que los supuestos caseros del diputado Rivas, recibían salarios de la Cámara de Diputados.
JUICIO ORAL. Además, ayer continúo el juicio a los supuestos caseros del diputado, Reinaldo Chaparro, Nery Franco y Lucio Romero Caballero, acusados por los supuestos delitos de estafa y cobro indebido de honorarios.
El juicio se realiza ante los jueces Carlos Hermosilla, Héctor Fabián Escobar y Wilfrido Peralta. Declaró el funcionario del laboratorio forense que hizo el cruce de llamadas. El juicio seguirá esta mañana a las 08:00, donde continuará con su segundo informe.
La Fiscalía sostiene que las evidencias colectadas hasta el momento, demuestran que Chaparro, Romero y Franco fueron contratados en la cámara de Diputados, pero trabajaban para Rivas.