El objetivo es recuperar esa residencia y convertirla en la embajada y, de ese modo, el Estado ahorraría unos USD 5 mil dólares al mes, al dejar de alquiler las actuales instalaciones donde funcionan las oficinas de la embajada en Santiago, explicó Juan Andrés Cáceres, viceministro de Administración y Asuntos Técnicos, del Ministerio de Relaciones Exteriores.
De este modo, el embajador, Antonio Rivas Palacios, estaría alquilando otra casa para su residencia. El año pasado, Cancillería barajaba la idea de poner en venta esta residencia en Santiago, al igual que la que se tiene en Washington DC la cual, según había explicado el anterior embajador, Manuel María Cáceres, está en condiciones inhabitables. Tras evaluar opciones, incluyendo un informe técnico sobre el estado de la elegante vivienda, en marzo de 2020 la recomendación había sido ponerla en venta y comprar con esta operación otras sedes para embajadas y consulados.
USD 32.333
costará al Estado poner en condiciones y convertir en embajada la actual residencia oficial que tiene en Santiago de Chile.