Los primeros 45 minutos, de lo mejor si nos referimos en lo colectivo de los dos equipos. El dueño de casa fue quien tomó riendas del encuentro y rápidamente, antes de los 15’, ya se imponía mediante Maravilla Martínez. Ese golpe más allá de asustar al adversario lo despertó, después del gol salió a proponer lo mejor de su repertorio. Toques precisos y quirúrgicos de los mediocampistas que se asociaban con Marín y Salcedo. Esa sucesión con el balón dio frutos. Jorge Mendoza marcó la paridad y pocos minutos después Antonio Marín adelantaba a la visita, resultado hasta ese momento merecido. Shockeado el Gumarelo fue a vestuarios. La segunda mitad fue todo de Libertad, a sabiendas que la derrota o el empate sería letal, ante la aspiración de seguir en carrera por el título. Sin dudas, Ramón metió los cambios precisos pensando en el arco rival y fue correspondido.
Óscar Tacuara Cardozo marcó el empate y la remontada. Los otros dos goles fueron del Sebas Ferreira.
Libertad se complicó más de lo esperado, Guaireña se hizo fuerte y Ramón encontró la llave.