Algunos incluso vaticinan que ya quedaría en manos del próximo Parlamento, que asumirá a partir del 1 de julio.
Es el caso de puntos polémicos que generan división y marcadas posturas, como el proyecto de reforma policial, el convenio con la UE (Unión Europea) e hidrovía.
A pesar de que se había aprobado en general la propuesta sobre reforma policial, que fue una iniciativa de Fidel Zavala, de Patria Querida, sus colegas le hicieron el vacío hace un par de semanas, cuando se convocó a una extraordinaria para finiquitar.
Era el único punto del orden del día, pero solo se conectaron 18 senadores y no hubo noticias de una mayoría de 27 colorados, liberales y luguistas que se ausentaron.
Zavala, quien apareció en forma presencial, salió en defensa de su proyecto y aseguró que es una respuesta al reclamo generalizado de la ciudadanía sobre seguridad.
“La Policía Nacional debe reformarse en varios aspectos. Son cinco ejes que mencionamos, el mecanismo de ascenso, de acceso a cargos. Se abre la posibilidad de que se concurse”, fue lo que había alegado el senador.
Además, rechazó los cuestionamientos en relación a que varios artículos serían inconstitucionales, entre ellos, modificaciones en cuanto a la cadena de mando.
“Uno recorre el interior. Vayamos a lo que es Central, los asentamientos. El fenómeno delincuencial viene mutando, corporativizándose, trasnacionalizándose. El tema de las drogas viene deteriorando a las familias paraguayas”, fue la advertencia de Zavala.
Al final se volvió a fijar una nueva fecha, en la primera quincena de mayo, pero tampoco hay seguridad.
CONVENIO CON LA UE. Al igual que en las internas pasadas, esta vez el cartismo y Patria Querida estuvieron presionando para que el Senado trate la derogación del convenio con la UE (Unión Europea), que ya tiene media sanción de la Cámara de Diputados.
El propio organismo tuvo que emitir un comunicado para aclarar en qué consiste el apoyo que otorga al Ministerio de Educación.
En cuanto a los fondos desembolsados, detallaron que el MEC destina a kits escolares, alimentación, textos educativos e infraestructura.
Asimismo, la UE aclaró que no decide el contenido de la malla curricular del sistema público educativo paraguayo y que esa responsabilidad recae en las autoridades nacionales.
Los que están promoviendo la derogación aseguran que el objetivo supuestamente es imponer la cuestión de género.
El senador cartista Enrique Riera, en su carácter de ministro de Educación, había firmado el convenio y actualmente es uno de los que están en contra.
Hace una semana él y Georgia Arrúa, de Patria Querida, volvieron a la carga insistiendo en que se trate el proyecto antes de las elecciones.
Hubo varios cruces, pero una mayoría se mantiene en que se defina después.
Riera había presentado, posteriormente, un proyecto de resolución instando al Ejecutivo a utilizar los fondos de la cooperación definiendo tres puntos, entre los cuales citó el almuerzo escolar, la infraestructura y la conectividad.
Como no tuvo eco el pedido de tratar la derogación, el parlamentario quería que se trate su propuesta, pero tampoco tuvo apoyo.
“La pregunta es por qué no podemos nosotros tratar este tema y buscar solución extrema (...). Pedir la revocación del Convenio y usar fondos pero con destino que no generen temor. Es una legítima preocupación de los padres”, fue el discurso de Riera.
Senadores de distintos partidos políticos coincidieron en que se podría contaminar el debate, teniendo en cuenta que están en campaña.
Aunque no se fijó ninguna fecha específica para el tratamiento, y solo se indicó que sería luego de los comicios, no se descarta la posibilidad de que siga cajoneado.
hidrovía. En medio de una mesa de trabajo en la que se estaba analizando el proyecto sobre hidrovía, el Ejecutivo había decidido retirar su proyecto y presentar otro.
Se trata de un memorándum de entendimiento, firmado entre Paraguay y EEUU, para la elaboración de un plan maestro de navegabilidad del río Paraguay.
La iniciativa plantea una adjudicación directa de USD 20 millones al Cuerpo de Ingenieros del Ejército de los EEUU, que se encargaría de la cooperación para la elaboración de la propuesta.
Aunque hay un dictamen favorable de la Comisión de Hacienda, hay marcadas posturas, como el caso del Frente Guasu, que no está de acuerdo con la intervención de EEUU.
Algunos senadores consideran que se tendría que dar oportunidad a los ingenieros paraguayos en esta tarea, y además les parece que el monto es exorbitante.
Una de las que están a favor es la oficialista Lilian Samaniego, quien cada vez que se le consulta sobre el tema sugiere que se trate y se defina.
Se había incluido en el orden del día de la sesión ordinaria del jueves pasado, pero luego de un debate y una serie de cuestionamientos también se pasó para mayo.
“Es clave para el futuro económico. Va a traer desarrollo en las ciudades ribereñas. La gente que se opone no quiere el desarrollo”, es el discurso que mantiene Samaniego.
“Es un tema que lleva años. Es urgente, necesario”, acotó. “Algunos senadores se oponen (...). Creo que hay que tratar, hay que aprobar, hay que hacer las modificaciones que consideren”, señalaba.
Además, salió en defensa del asesoramiento por parte de EEUU, y que esta iniciativa ya lleva dos periodos.
“Las veces que tratamos se le hicieron consultas, y es necesario el asesoramiento. Respondieron todas las preguntas. Vinieron del sector privado, de los gremios, y hay que tratar”, fue la postura de la oficialista sobre la hidrovía.