Su llegada interrumpió todo tipo de actividad en el edificio de ÚH. Carlos Báez, más conocido como “Aquiles”, fue recibido con aplausos y requerido para las fotos y los autógrafos, a los que el capitán de Cerro Porteño respondió con sencillez y excelente predisposición.
Claro, no es para menos, se trata de uno de los futbolistas más carismáticos de nuestro país y, para los lectores de ÚH, el mejor de la temporada 2006.
Feliz por la distinción, “Aquiles” rememoró con ÚH lo que fue la temporada 2006: “La verdad que con Cerro Porteño tuvimos un año fabuloso. Por cosas del fútbol no le pudimos poner la frutilla a la torta, que la hicimos bastante bien, con un campeonato invicto que hace bastante tiempo la institución no lo lograba. Como capitán de este equipo estoy muy orgulloso de todos mis compañeros”.
–¿Se puede decir que este año tuvo dos etapas bien distintas para vos?
–Sí. Más que nada, creo que tuvimos un gran incidente contra el Palmeiras, que todo el mundo vio y que fue un hecho no muy bueno. Pero todo cambió después de la responsabilidad que me dio el profesor Gustavo Costas, que era muy grande para mí. No podía defraudar a toda la gente que depositó en mi persona su apoyo, como el presidente, mis compañeros, la hinchada, los dirigentes y mi familia. No podía defraudarles; sentía una presión muy grande. Gracias a la confianza que depositaron en mí, hoy soy el que todos están viendo.
–Que fueran los lectores quienes te hayan elegido, ¿qué representa para vos?
–La verdad que es una alegría inmensa. Me sentí muy feliz al recibir, vía telefónica, la noticia. Estoy muy orgulloso de saber que valoran el sacrificio que uno hace día a día. Durante este año me he sacrificado mucho; toda mi vida me sacrifiqué y recibir un premio así es un honor. Para mí es lo máximo.
–Para los hinchas, hoy, más que el jugador y capitán, sos una persona a la que respetan mucho. Eso no todos lo consiguen...
–Sí. La verdad que tenemos una afinidad muy importante con la hinchada, y aprovecho también para agradecerles, porque parar a los muchachos a veces se pone un poco difícil, pero ellos me hacen caso y les estoy muy agradecido.
–¿Cómo sentís el aliento popular constante?
–Que la gente me reconozca todo el empeño que pongo por la institución me pone muy contento. Me hace dormir día a día con la conciencia tranquila el saber que todo el sacrificio que estoy haciendo se reconoce.
–¿La selección nacional es un tema pendiente?
–Sí. Es una cuenta pendiente que con los logros, con el trabajo diario podemos lograr.
–¿Qué esperás para el 2007?
–En mi carrera deportiva, seguir creciendo cada vez más. Creo que estoy en un pico alto muy importante, muy bueno, así que tengo que aprovechar para seguir creciendo. Y para Cerro Porteño, evidentemente, que siempre deseo lo mejor.
–La hinchada pide la Libertadores. ¿Creés que el próximo año se puede trabajar bien para lograrla?
–La palabra exacta es esa: trabajar. Hay que trabajar bien para ganar un título tan importante como es la Libertadores. Y creo que tanto el presidente como toda la dirigencia y el cuerpo técnico se van a poner en marcha para esta difícil copa.
–Finalmente, ¿por cuánto tiempo más en Cerro?
–El presidente está manejando algunas opciones en países de afuera, como Argentina, por ejemplo, así que la respuesta la tiene él.