En la siesta de ayer fue remitido a la penitenciaría de Tacumbú, Jorge Prisco Ledezma Ortiz, quien es sindicado, según los primeros indicios obtenidos, como el autor del disparo al aire que acabó con la vida de la niña de 3 años, Paz Valentina Arce Vera, en la celebración de la Navidad.
El juez Rubén Ayala Brun decretó la prisión preventiva tras la imputación por homicidio doloso con dolo eventual presentada por el fiscal Carlomagno Alvarenga, quien solicitó al juzgado su remisión al penal.
El taxista es responsable, además, de los hechos punibles de violación de la ley de armas y producción de riesgos comunes, según la imputación. El informe balístico de la Policía arrojó como resultado que la bala del arma Taurus calibre 38, propiedad del taxista, fue la que impactó en el cuerpo de Paz Valentina, lo cual le produjo la muerte.
Ledezma, quien admitió el viernes haber hecho tres disparos al aire con su arma, se abstuvo de declarar ayer en la Fiscalía. El fiscal explicó que lo dicho por él a la Policía no cuenta en la investigación; sin embargo, señaló que obtuvo testimonios de vecinos que señalan haber visto al hombre disparando desde la terraza de su casa.
El director del penal, Artemio Vera, señaló que el hombre pasará 48 horas en admisión y luego irá a un pabellón. Añadió que el mismo sufre de una afección en la próstata.
LA IMPUTACIÓN. El fiscal Carlomagno Alvarenga presentó ayer la imputación contra el taxista por homicidio doloso con dolo eventual, con expectativa de pena de 5 a 20 años de prisión.
El fiscal mencionó que hay dolo eventual porque “en su accionar había una certeza de que podía causar un daño”.
La casa del taxista se encuentra sobre las calles Cardenal Royg casi Sucre, del barrio Herrera, de Asunción, a unos 1.500 metros aproximadamente de distancia de la casa de Paz Valentina, en el barrio Santa María, indicó la Policía. Según la pericia, el disparo de su arma tiene un alcance de 1.000 a 1.500 metros.
En la mañana del viernes se realizaron tres allanamientos, tras 72 horas del suceso ocurrido a la 00.10 aproximadamente del martes 25 de diciembre último.
En un principio se demoró al suboficial Valentín Paredes, quien posee un arma 357, junto al taxista. El mismo aseveró no haber hecho disparos al aire y entregó su arma para la pericia, pero esta solo se hizo con el arma del taxista.
ABOGADA SOLICITA CAMBIO DE CARÁTULA DE IMPUTACIÓN
“En el caso de probarse que mi defendido es el responsable del disparo que mató a la niña, la imputación debería ser por homicidio culposo, porque no había intención de dolo”, explicó la abogada Noemí Samaniego. La misma solicitó al juez la reforma de la carátula.
Agregó que la investigación de la Policía se hizo a espaldas de la defensa, ya que se realizó sin previo aviso, por lo tanto solicitará que las pruebas se realicen de vuelta.
“Genera suspicacias el hecho de que junto a mi defendido estuvo demorado un personal policial y que la prueba no se haya hecho con su arma”, dijo en torno a la investigación policial.
Sostuvo que no se puede afirmar que el taxista haya disparado, ya que no se realizó una prueba de nitrito y nitrato y las afirmaciones no se hicieron en público.