Una Justicia benevolente y un Parlamento que aún acoge a varias cuestionadas figuras dentro de sus senos, hace que aún se resistan en sus investiduras de parlamentarios 8 legisladores, la mayoría de ellos con causas abiertas y pendientes de condena. La ciudadanía autoconvocada aguarda que más políticos acompañen a los cuatro legisladores que en este período perdieron su banca por la presión social.
Aidé Vera, de la Comisión Escrache Ciudadano, anticipó que los escraches se reanudaron y que no pararán hasta que la Justicia y la institución, que acoge a ocho parlamentarios con denuncias por distintos ilícitos –la mayoría de ellos con casos abiertos y pendientes de condena–, den señales a una ciudadanía que reclama por justicia.
“Hay mucho trabajo por hacer en el caso de nosotros, porque hay una larga lista de legisladores sospechados de corrupción pública. Si bien, varios de ellos están con procesos, estaremos exigiendo que se agilicen en la medida que nos corresponda”, dijo.
En relación a la serie de legisladores (ver lista) que siguen sin ser procesados, como el presidente de la Cámara Baja, Miguel Cuevas, y el senador liberal, Dionisio Amarilla, ambos denunciados por enriquecimiento ilícito, señaló que insistieron para que ambos sean imputados.
“Seguimos nosotros reuniéndonos con la fiscala general del Estado, sobre todo lo que tiene que ver con hechos de corrupción de los legisladores, y exigimos dentro de esto al Ministerio Público que realice la imputación correspondiente, tanto a Cuevas como a Amarilla, porque los dos tienen bastante elementos para ser imputados”, refirió.
Señaló que cuando los pasos formales no funcionan es ahí donde activan las medidas de escrache, que hasta ahora ha funcionado, dado que ya son cuatro los legisladores –el último fue Víctor Bogado– por hechos de corrupción.
“Como sociedad civil estamos siguiendo muy de cerca estos procesos. Es más, procesos como los de Víctor Bogado han llegado a la condena, irrisoria si se quiere, pero condena al fin por la presión ciudadana”, dijo y lamentó que solo en función a las presiones y al escrache, recién las instituciones terminen haciendo su trabajo. “Aplaudiremos a los parlamentarios que sigan votando por la pérdida de investidura de los que no merecen estar en esos cargos”, sostuvo.
Lista. Quedan pendientes de que se destraben varias causas que están en el ámbito judicial. La del diputado Tomás Rivas (en espera del desafuero). Miguel Cuevas y Dionisio Amarilla, con frondosas denuncias pero aún sin imputación. Además, los imputados Javier Zacarías Irún y el diputado Carlos Portillo, para quienes existen fundados elementos para la pérdida de investidura. Terminan la lista los parlasurianos Milciades Duré y Enzo Cardozo, con frondosos antecedentes.