Se trata de los jueces Aniceto Amarilla Arévalos, Isidro González Sánchez y Miryan Meza de López, que revocaron la prisión de un ex policía condenado a 10 años.
Los miembros del órgano extrapoder argumentaron que no pueden realizar el estudio de sentencia, ya que el ministro de la Corte, César Diesel, que fue designado por la Corte Suprema de Justicia para representarla en este caso, pidió más tiempo para interiorizarse del caso. El 26 de mayo ya se aplazó la decisión por ausencia del ministro Antonio Fretes.
Un grupo de personas venidas de Ciudad del Este llegaron frente al edificio del JEM, en Asunción, desde tempranas horas para seguir el caso.
Cuando supieron que no se tendría resolución sobre el caso, hubo una indignación generalizada. Hicieron sonar petardos y protestaron por el hecho.
La ministra Gladys Bareiro pidió que sean sacados por la Policía, por el ruido que estaban generando.
Horas más tarde, algunos de estos manifestantes escracharon a la ministra frente a su casa.