El feminicidio ocurrió el 13 de diciembre del año pasado en Villarrica, cuando Baeza irrumpió la vivienda de la menor y la atacó con un cuchillo. La adolescente recibió mortales estocadas en la zona del abdomen, que le ocasionaron la muerte.
El ataque ocurrió cuando la joven estaba tomando tereré con su hermana Natalia Luján Paiva Núñez (22), quien en ese momento se encontraba embarazada.
Las hermanas estaban en el patio de su casa situada en el barrio San Blas, cuando divisaron a Baeza llegar en una moto y sin mediar palabras atacó con el cuchillo a Iris. Incluso, una cuarta puñalada fue evitada por la intervención de una hermana de la víctima, ante lo cual el autor y su cómplice se dieron a la fuga.
Natalia aseguró haber presenciado la muerte de su hermana y entre lágrimas confesó que el autor fue Baeza. “Yo estuve presente cuando su ex llegó a la casa y sin mediar palabras con un cuchillo le clavó a mi hermanita, dos en la espalda, y uno en el cuello”, contó la testigo durante el juicio oral.
El trasfondo del feminicidio sería que la joven había puesto punto final a una relación con el condenado, situación que el mismo no había soportado.
La fiscala María Agustina Unger señaló estar satisfecha con el resultado del juicio oral, donde se puderon demostrar los hechos concretos y elementos utilizados para perpetrar el feminicidio.
Los jueces Nancy Roa, Luis Giménez y Élida Bogado conformaron el tribunal que condenó a José Miguel, quien guardará prisión en el Penal Regional de Coronel Oviedo.
La jueza Nancy Roa señaló que se comprobó la autoría de Baeza en el crimen, por tener imágenes de un circuito cerrado, cruce de llamadas y la declaración de la testigo presencial del hecho, Natalia Luján Paiva, hermana de la víctima. También explicó que el propio Baeza confesó haber asesinado a Iris Celeste, alegando celos, pero no demostró arrepentimiento, incluso, seguía amenazando a la familia de la víctima.
La jueza dijo que tras practicarle estudios sicológicos y siquiátricos a Baeza, el resultado arrojó que el mismo es una persona peligrosa, por lo que otras personas también estarían en riesgo.