La resolución favorece a Antonia Acosta y Blas Centurión, quienes ayer debían ser sometidos al cuarto juicio oral y público, por presunto homicidio culposo, por la muerte del recién nacido Pablo Ibarra.
En el juicio oral, las defensas de los dos acusados presentaron un pedido de extinción de la acción penal, por la reparación del daño, y presentaron la escritura pública que firmaron con los padres del bebé recién nacido.
El fiscal de la causa Óscar Laterza se allanó al pedido de las dos defensas, al igual que la querella representada por la abogada Raquel Mendieta.
Así, los jueces Rossana Maldonado, Lourdes Peña y Manuel Aguirre Rodas, que juzgaron la causa, admitieron el acuerdo entre los médicos y los padres, por lo que dispusieron la extinción de la acción penal y el sobreseimiento de los dos médicos.
En el caso, el hecho ocurrió en agosto del 2011, en el Hospital Central del IPS. Falleció el bebé recién nacido Pablo Ibarra. Según la fiscalía, su madre Amelia Rodríguez de Ibarra acudió a la previsional para control y quedó internada.
Pese a la recomendación de una cesárea, los médicos le practicaron un parto normal. El niño pesaba más de 4 kg y la mujer tenía hipertensión arterial. Al final, el bebé murió.
