Esta semana se dictará la sentencia en el caso que juzga a cinco policías y dos civiles por el atraco a la firma Guardián SA, donde robaron casi 5.200 millones de guaraníes. Hoy, a las 8.00, se darán la réplica y dúplica, las palabras finales de los acusados y ya entrarán los jueces a deliberar.
En el juicio oral, la Fiscalía pidió penas de 20 años de cárcel para Adan Abelino García Muñoz; 12 años para Patricio Antolín García Muñoz, Braulio Machado, todos policías, y para Secundino Martínez Barrios, un mecánico.
Además, se piden 7 años para el agricultor Ramón López Caballero, y 4 años y medio para los policías Óscar López Encina y Édgar Ramón Chena Pavón.
Por su parte, la defensa de los acusados solicitó la semana pasada, la absolución de culpa y pena de todos los acusados. Esto, porque no se probó la vinculación.
DEFENSAS. Hubo varias defensas. Uno de ellos, la del policía Patricio Antolín García Muñoz, quien estaba en el Norte para combatir al Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP).
Según explicó a los jueces, tenía comunicación con el prófugo José Rumildo López –con cinco antecedentes por homicidio– porque supuestamente este estaba negociando con el comisario Antonio Gamarra para atrapar a un cabecilla del EPP.
Alega también en su defensa que fue su hermano, Adán Abelino García, quien le presentó a José Rumildo López, y que luego este le daba los datos de los miembros del EPP.
Dijo que estaba por Asunción con el también acusado Braulio Machado (sobrino del ex comandante de Policía, Viviano Machado), en una discoteca que queda a la vuelta de donde supuestamente hubo la repartija del dinero.
Finalmente, explicó que le llamaron desde Concepción porque el EPP atacó un retiro y debía ir. Le pidió a Machado para que lo llevara a la terminal y luego que lo llevara ya a Concepción.
Otro acusado habla de que solo le dio a otro un vehículo para venderlo en Asunción, y que no sabía nada del multimillonario atraco.
Según los jueces Mesalina Fernández, Nilda Giménez y Fabián Weinsensee, el caso es bastante complejo y podría llevar varios días la deliberación para poder dictar un veredicto.
