Richard Darío Enriquez Bernal, el pizzero que estuvo privado de libertad por matar a un supuesto asaltante, fue beneficiado ayer con la libertad ambulatoria y afirmó que desea retomar su vida normal, luego de los días que pasó tras las rejas.
“Sigo consternado, porque no pensé pasar por esto”, expresó a los medios de prensa al salir de la audiencia con la jueza Ana Esquivel, quien le otorgó el beneficio a pedido del Ministerio Público.
El hombre fue imputado y permaneció preso por pedido de la fiscala Estela Cardozo, que lo imputó por homicidio doloso con reproche reducido por excitación emotiva, luego de apuñalar a un hombre que habría entrado a su local con intenciones de robo, atacando a una de las funcionarias.
el caso. El hecho ocurrió el pasado 29 de abril, cuando Matías Alcaraz (19) llegó en motocicleta con otra persona a la pizzería La Avenida, ubicada sobre Teniente Américo Picco y Río Manduvirá, de Villa Elisa.
De acuerdo al informe policial, Alcaraz bajó de la moto armado e ingresó a la pizzería. Enriquez lo enfrentó y le aplicó una puñalada en el tórax. Ambos asaltantes huyeron, pero el joven fue encontrado sin vida a 300 metros del lugar.
Una ola de críticas se desató por la decisión de la fiscala Cardozo, al punto que se convocó a una movilización ciudadana para apoyar a Enriquez.
Debido a la presión ciudadana, el Ministerio Público decidió remover de la investigación a la fiscala y designó a la dupla conformada por los fiscales María Irene Álvarez y Giovanni Grisetti.
Luego de solicitar la libertad ambulatoria, los agentes del Ministerio Público también pidieron al Juzgado el sobreseimiento definitivo del comerciante.