A lo largo de la avenida Pratt Giill, que une a las ciudades de San Lorenzo y Ñemby, se pueden observar baches y pozos de varios tamaños. Las constantes lluvias empeoran la situación que deja al descubierto la falta de respuestas de la Comuna.
Los vecinos en varias ocasiones ya comunicaron sobre la existencia de enormes agujeros en las arterias. Los usuarios contaron que se realizan trabajos de bacheos, pero que no tardan en volver a aparecer.
Igualmente, denunciaron a NPY que las autoridades no escuchan sus reclamos, ya que la responsabilidad es compartida con la Comuna de la ciudad de Ñemby.
Mientras tanto, un agujero en el pavimento se va agrandando cada vez más y se vuelve peligroso para conductores y peatones.
Los automovilistas que usan esa zona deben turnarse para poder pasar, luego de esquivar los baches y así poder seguir con el trayecto.
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Los lugareños no tuvieron otra opción más que señalar los enormes pozos para evitar cualquier accidente de tránsito. Incluso, colocaron un muñeco en el sitio ante la ausencia de las municipalidades.
“Vienen a arreglar, pero con una lluvia se va todo el arreglo que hacen. La semana pasada vinieron y en la primera lluvia se fue todo”, relató un poblador e indicó que solo aparecen por presión de los medios de comunicación.
Días atrás, en la ciudad de Luque un ciclista sufrió lesiones en la rodilla y el rostro tras caer a un enorme pozo que se formó sobre la calle Teniente Rojas Silva.
El joven sufrió lesiones en la rodilla izquierda, en el brazo, en la cara y en las manos. Igualmente, el afectado dijo que tuvo una pequeña sutura en el mentón y se rompió un diente a consecuencia del fuerte impacto al caer.
