Cuando hablamos de pastas en Paraguay, el nombre Anita aparece de manera automática en la memoria colectiva. Esto no es casualidad, ya que la marca acaba de recibir, por decimotercer año consecutivo, el reconocimiento en el Ranking de Marcas 2025, en la categoría de Fideos. Este es un logro que, lejos de ser solo un trofeo, se convierte en la validación de una historia de tres décadas y en un puente directo con el consumidor paraguayo, que sigue eligiendo confianza, calidad y sabor.
Para la marca, este reconocimiento es mucho más que un título. “Es un orgullo y una confirmación de la confianza que los consumidores paraguayos depositan en nosotros cada día. Para todo el equipo de Anita representa la motivación de seguir trabajando con calidad, innovación y cercanía”, afirma María Liz Figueredo Vierci, brand manager de Pastas Anita.
La cercanía se traduce en algo muy concreto; la marca no solo está presente en las mesas de las familias tradicionales, sino también en la de los jóvenes que buscan practicidad, variedad y un sabor auténtico para acompañar sus rutinas aceleradas. Desde los clásicos nido spaghetti hasta formatos como moñito, cortadito, caracolito, al huevo e integrales; la oferta supera las veinte variedades y se adapta a estilos de vida distintos.
Aunque el mercado paraguayo sigue siendo su fortaleza, Anita también pisa fuerte en el extranjero con presencia en países como España y Estados Unidos, donde las pastas nacionales conquistan a quienes buscan calidad con sello local. Su fábrica en Itauguá es el corazón productivo de una marca que año tras año reafirma su liderazgo, con un volumen de producción que la posiciona como referente indiscutible.
El producto estrella, el nido spaghetti, se convirtió en un símbolo de la marca y es acompañado por campañas que combinan medios tradicionales con un fuerte énfasis en redes sociales. Con mensajes que apuntan al disfrute, la unión familiar y el valor de compartir, Anita conecta con las emociones de sus consumidores.
Proyección
El futuro de Pastas Anita está marcado por la innovación. La marca proyecta nuevas presentaciones, formatos que respondan a los hábitos de consumo actuales y una estrategia digital que refuerce la interacción directa con sus seguidores forman parte de los próximos desafíos. “Nuestro gran objetivo es seguir innovando, adaptándonos al consumidor paraguayo y fortaleciendo nuestra presencia en canales modernos”, expresó Figueredo.
Más allá de premios, reconocimientos y cifras, Pastas Anita destaca el agradecimiento a quienes hacen posible su liderazgo. “Cada paquete de Anita que llega a una mesa es fruto del trabajo en equipo y de la confianza de nuestros clientes. Este premio es de ellos también”, menciona la ejecutiva.
Con 30 años de trayectoria y 13 distinciones consecutivas, Pastas Anita reafirma que la tradición combinada con innovación forman parte de la receta perfecta para seguir conquistando paladares y consolidar un vínculo emocional que trasciende generaciones.