01 nov. 2025

Pasan a manos de Senabico los bienes de Miguel Celular

Al menos quince inmuebles que pertenecen a Miguel Servín, alias Miguel Celular, pasarán a ser administrados por la Secretaría Nacional de Administración de Bienes Incautados (Senabico).

El hombre es un presunto narcotraficante y sus bienes, valuados en 15 millones de dólares, fueron incautados en medio de las investigaciones por el envío de cocaína a Europa, realizadas por el fiscal Ysaac Ferreira.

En esta causa, además de Celular, fueron acusados Cristian Turrini y Alberto Ayala Jacquet, sospechados de ser los responsables de la carga de 2.331 kilos de cocaína hallados en contenedores en un puerto privado de la localidad de Villeta.

Se trata de lujosas viviendas, una casaquinta, que están ubicadas en Pedro Juan Caballero, Departamento de Amambay, que Servín habría acumulado durante varios años. Automóviles de alta gama también forman parte de lo incautado.

Los allanamientos, más de veinte en diversas partes del país, fueron realizados como parte de la operación Belia.

ORGANIZACIÓN. El acusado obtuvo el apodo de Celular, ya que en sus comienzos se dedicaba a la venta de teléfonos celulares en Pedro Juan Caballero.

Desde principios del 2000 ya se tienen registrados algunos movimientos en el tráfico de drogas, de donde fue escalando poco a poco, para terminar erigiéndose en el líder de una organización, como jefe y financista, según manifiestan los expertos antidrogas que desde hace tiempo lo tienen en la mira.

Las investigaciones refieren que Servín sería quien coordinaba los envíos de cargamentos de cocaína a través de barcos desde puertos paraguayos a ciudades europeas o del Oriente Medio, como Israel, que serían sus principales mercados.

En el caso de la megacarga hallada en Villeta, los investigadores presumen que Servín tuvo la cooperación de Christian Turrini, quien sería el intermediario con empresas del extranjero, y de su socio Alberto Ayala Jacquet, dueño de una empresa dedicada a la producción de carbón vegetal.

Los intervinientes indican que la droga provenía desde Bolivia por vía aérea, pasaba por territorio paraguayo, donde era mimetizada entre cargas de carbón que eran exportadas de forma legal en contenedores que salían de puertos paraguayos. con destino a Europa.