Además de López, responsable del comando en el estado Trujillo (oeste), la formación ha denunciado la detención de sus jefes de campaña en las regiones de La Guaira (norte) y Yaracuy (oeste), Juan Freites y Luis Camacaro, respectivamente, quienes, según Vente Venezuela, fueron “secuestrados por el régimen”, en referencia al Gobierno de Nicolás Maduro.
“Cuerpos represores no dicen dónde están. La desaparición forzada es un crimen de lesa humanidad. Exigimos fe de vida y libertad inmediata”, escribió en la red social X el Comité de Derechos Humanos del partido, que exigió el cese de la “persecución política”.
“FURIA BOLIVARIANA”. Machado alertó este martes a la comunidad internacional de estas acciones, y aunque no atribuyó a ningún cuerpo de seguridad la detención de sus coordinadores, responsabilizó al Gobierno de estos hechos, así como de la vandalización de varias sedes de su partido, en cuyas fachadas escribieron “Furia Bolivariana”, nombre de un plan lanzado por el jefe de Estado para “defender el derecho a la paz”.
La opositora, sobre quien pesa una inhabilitación para ocupar cargos públicos de elección popular hasta 2030 –que espera le sea levantada mediante la negociación con el Gobierno–, aseguró entonces que “todo el aparato represivo del Estado” intenta “disuadir y desmoralizar” a sus seguidores.
El pasado jueves, Maduro acusó a la “ultraderecha” de tener un “plan conspirativo” y “golpista”, y advirtió que quienes intenten desestabilizar al Ejecutivo “se encontrarán con la furia bolivariana” del pueblo. EFE