La profesora Nancy Giménez y su novio, el oficial de Policía Rafael Ramos, continúan con su lenta recuperación física y emocional tras ser liberados luego de estar 19 días en cautiverio. Varios medios de prensa volvieron a ir a la casa de Nancy, en San Lorenzo, para una entrevista pero se excusó, según su madre Priscila de Giménez. Salió al balcón y saludó a la gente.
Envió una nota a los presentes, donde agradece la presencia de todos, especialmente a sus alumnos, quienes también estuvieron en el lugar, por el apoyo constante para ella y su novio.
Hasta el momento el fiscal Antisecuestro que está llevando el caso, Rogelio Ortúzar, todavía no envió la citación a la pareja para la declaración testifical y aportar datos sobre el secuestro del que fueron víctimas circunstancialmente.
Según la madre de la docente, el oficial Ramos ya quiere declarar ante el Ministerio Público para luego ir a su ciudad natal a los efectos de descansar y reponerse por completo de lo que le sucedió. La casa de sus padres es en Caaguazú.
No reconoce. Según José María Giménez, hermano de Nancy, esta le dijo que no reconoce a sus secuestradores porque sus ojos estaban vendados todo el tiempo en que estuvo en cautiverio.
Esta situación, en cierto modo, representará una dificultad para los investigadores en el momento de su declaración.
Ya pasaron 6 días en que la pareja fue liberada por los secuestradores junto con el japonés Hirokazu Ota, en la zona de Presidente Franco, tras el pago de unos 138 mil dólares.
Desde ese día tanto la docente como el oficial de Policía no han dado declaraciones a los medios de prensa por ciertas situaciones emocionales, que aún no fueron totalmente superadas por las víctimas del plagio.