El secretario general la OTAN, Jens Stoltenberg, advirtió ayer a Rusia y a otros posibles enemigos de que la Alianza Atlántica está dispuesta a utilizar todos los medios a su alcance para responder a los ciberataques.
Las declaraciones de Stoltenberg tienen lugar en un momento en que los países del bloque están en alerta ante la posible interferencia en las elecciones al Parlamento Europeo, que comenzaron ayer en el Reino Unido y Holanda.
Los aliados occidentales han acusado a Rusia de intentar influir en el resultado de las elecciones presidenciales de 2016 en EEUU, y de utilizar la tecnología cibernética para paralizar la infraestructura de su rival Ucrania, acusaciones que Moscú niega rotundamente. “Para que la disuasión tenga pleno efecto, los posibles atacantes deben saber que no estamos limitados a responder en el ciberespacio cuando somos atacados en el ciberespacio”, dijo Stoltenberg en Londres, junto al ministro británico de Relaciones Exteriores, Jeremy Hunt.
“Podemos y usaremos toda la gama de capacidades a nuestra disposición”, agregó.
Hunt afirmó que, en el último año y medio, el Reino Unido compartió con 16 de sus aliados en el seno de la OTAN –organización formada por 29 estados– y otras naciones fuera de la Alianza detalles de actividades cibernéticas ilícitas llevadas a cabo por Rusia en sus países. “En la era cibernética, los estados autoritarios tienen formas de socavar las sociedades libres que los dictadores de tiempos anteriores habrían envidiado”, dijo el canciller británico.
Ambos participaron en una Conferencia de la OTAN sobre Defensa Cibernética en Londres, durante la cual Hunt acusó a los servicios de inteligencia rusos de organizar una campaña global contra infraestructuras claves. “Esta campaña global también busca comprometer a las redes de los gobiernos centrales”, advirtió.
Hunt afirmó que los intentos de influir en las elecciones de EEUU y Ucrania violan el derecho internacional y justifican una respuesta proporcionada. Y llamó a sus socios a la cooperación frente a Moscú: “Juntos, tenemos opciones para responder a cualquier ataque. Deberíamos estar preparados para usarlos”.
Las relaciones diplomáticas entre Reino Unido y Rusia están en su peor momento desde el envenenamiento del ex espía ruso Sergei Skripal, en la ciudad inglesa de Salisbury, el año pasado. Londres atribuyó el intento de asesinato a Moscú, que niega estas acusaciones.
La visita de Stoltenberg se inscribe en los preparativos de la cumbre de la OTAN, que tendrá lugar 3 y 4 de diciembre en la capital británica.