La alta comisionada de la ONU para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, dijo este lunes estar “profundamente impactada” por las condiciones de detención de los migrantes en Estados Unidos, subrayando por otro lado que no habría que separar nunca a los niños de sus familias.
“Como pediatra, pero también como madre y ex jefa de Estado, estoy profundamente impactada de que unos niños sean obligados a dormir en el suelo en instalaciones superpobladas, sin acceso a cuidados de salud o a alimentos adecuados y en malas condiciones sanitarias“, declaró Michelle Bachelet.
“Detener a un niño, aunque sea por periodos breves y en buenas condiciones, puede tener graves consecuencias sobre su salud y su desarrollo. Piensen en los daños causados cada día si se deja que esta situación alarmante perdure“, agregó.
“En la mayoría de los casos, los migrantes y refugiados se aventuraron en peligrosos viajes con sus hijos en busca de protección y dignidad, lejos de la violencia y del hambre. Cuando finalmente creen que llegaron en condiciones de seguridad, se ven separados de sus seres queridos y encerrados en condiciones indignas“, insistió Bachelet. “Esto nunca tendría que pasar en ninguna parte”.
Varios órganos de derechos humanos de Naciones Unidas han advertido que la detención de niños migrantes podría constituir un trato cruel, inhumano o degradante, prohibido por el derecho internacional. AFP