La amenaza del coronavirus estaba latente, pero nadie estaba preparado para el confinamiento, hasta que el virus ingresó al país y las autoridades tomaron las acciones inmediatas que produjeron cambios en los hábitos familiares, sin posibilidades de organización previa. La cuarentena puso en pausa a las actividades cotidianas, y los niños son los que más sufren y asienten en esta situación. Al respecto, la sicóloga Rosarito Franco comenta algunas precauciones que debemos tomar en casa, por el impacto que podría producir el aislamiento social en la salud sicológica de los más pequeños del hogar.
CONTENCIÓN FAMILIAR.
No se sabe a ciencia cierta si los niños saldrán afectados a consecuencia de la cuarentena, según la experta. Es un fenómeno que “recién podría ser observado o evaluado al final de este periodo”, indica, y recalca que la clave es la contención afectiva que brinden los adultos para evitarlo. “La manera en que los adultos sostengan esta realidad es fundamental. Es necesario facilitar un ambiente de paciencia y de diálogo generoso entre toda la familia”, expresa la profesional, que es especialista en la crianza, educación y desarrollo del niño.
“Ante todo lo que ocurre, los niños son los más blandos entre los duros”, afirma la sicóloga. Sin embargo, son los vencedores en esta situación, porque tienen una capacidad de adaptación que ningún adulto tiene. “Los niños tuvieron que aceptar y adecuarse a todo. A no ir más a la escuela, no salir a jugar al parque con sus amigos o en algunos casos, no visitar a sus abuelos”, afirma Rosarito.
Según la profesional, la forma correcta en que el adulto deba transitar es con la armonía y la interacción en el hogar. Para ello aconseja el diálogo con los hijos, aportándoles tranquilidad. “Si los padres están bien, los niños también. El confinamiento hay que atravesar con buen humor, amabilidad, cariño y generosidad. Y, sobre todo, darle mucho afecto con contacto físico a través de besos y abrazos”, explica la licenciada.
NO TODO ES NEGATIVO
Paradójicamente se puede decir que el coronavirus, a nivel familiar, deja un valioso aprendizaje. Gracias al tiempo que los padres tienen en casa, pueden compartir y descubrir las capacidades que los hijos poseen.
Ante la ausencia del ritmo acelerado con la que se vivía, la profesional recomienda estructurar los días con rutinas y ofrecer actividades, para fomentar los vínculos familiares. “Podemos generar espacios de encuentro con los hijos. Aprovechar esta pausa que nos saca de prisa para realizar las tareas domésticas con los chicos, como cocinar o arreglar el jardín. Y así enseñarles lo que es la ayuda mutua y a la vez construir la autonomía del niño”, explica.
La experta insiste en la importancia de mantener los horarios de despertarse y acostarse, así como de utilizar calendarios para situarse en el día de la semana. “El manejo de los tiempos es muy importante, a qué hora van a bañarse, hacer alguna tarea de la escuela cuando a los padres les toque trabajar en casa”, expone.
En cuanto a las actividades escolares, la profesional recomienda evitar exceder a los niños con las tareas. “De esa manera no los agobiamos. Además, aprovechamos la oportunidad de verlos aprender de cerca”, refiere.
Para la Franco, la pandemia es una prueba de resistencia y espera que las familias salgan fortalecidas con todo lo acontecido. “Si entendemos todo esto, el confinamiento no habrá sido un tiempo muerto”, finaliza.
La pandemia llegó y cambió la forma de vivir de un día para otro, como si todas las actividades se pusieran en pausa. Los más vulnerables son los niños.
Fases en cuarentena
Durante la fase 1 de la cuarentena inteligente los niños, a partir de 10 años, ya pudieron salir de sus casas para realizar actividades físicas, por dos horas, tomando todas las medidas sanitarias.
Desde este lunes 25, con la implementación de la fase 2, los niños menores de 10 años tendrán la posibilidad de salir a realizar las actividades físicas, con las mismas disposiciones que la primera fase. Tomando todas las precauciones impuestas por el Ministerio de Salud.
Según las autoridades solo un adulto podrá acompañar al niño.