El trabajo preventivo que habían comenzado a realizar en las calles los agentes policiales del Grupo de la Unidad de Operaciones Tácticas Motorizadas, más conocido como Grupo Lince, desde su creación en el año 2017, trajo consigo varios defensores y detractores por su manera de operar. Sin embargo, en los primeros tres años de operatividad de los uniformados motorizados se había visto una considerable disminución del índice de criminalidad.
En la actualidad, ante la acuciante inseguridad que azota a la ciudadanía, la Policía Nacional y el Ministerio del Interior se ven cuestionados por el bajo resultado ante los hechos punibles que se multiplican a lo largo y ancho del país.
Los aumentos de los asaltos callejeros, en su mayoría perpetrados por motochorros, generan un fuerte cuestionamiento hacia las autoridades del orden público, a tal punto que el ministro del Interior, Arnaldo Giuzzio, y el comandante de la Policía Nacional, Luis Arias, están emplazados por el Gobierno para solucionar la ola de delincuencia.
En ese punto, la unidad motorizada de la Policía también es cuestionada por el deslucido trabajo preventivo de la actualidad, en comparación con sus inicios.
RECURSOS HUMANOS
El comisario Gustavo Ruiz Díaz, jefe del Grupo Lince, habló sobre la falta de recursos humanos, así como de herramientas para ejercer una cobertura completa de todas las zonas en que operan.
El comisario indicó, además, que su unidad tiene 560 agentes y cuenta con alrededor de 300 motocicletas, que fueron donadas por la Entidad Binacional de Yacyretá (EBY). Sin embargo, resaltó que la mayoría de estos biciclos se encuentran descompuestos, aunque no dio números precisos de la cantidad de motos que se encuentran averiadas y de las que se encuentran en condiciones para patrullar.
Igualmente, señaló que “humanamente” realizan sus labores preventivos y detenciones, buscando nuevas estrategias preventivas de delitos. También contó que el año pasado solamente 60 personas fueron especializadas para formar parte del Grupo Lince.
COMANDANTE
Al respecto, el comandante de la Policía Nacional, Luis Arias, había manifestado en conferencia de prensa que la presencia de los efectivos del Grupo Lince no ha mermado. Sin embargo, reconoció que algunas de las motocicletas utilizadas por los efectivos están descompuestas, lo que no impide que los efectivos cumplan con sus labores, aseguró.
Al ser consultado sobre una situación de brazos caídos por parte de los agentes policiales, el comisario general negó que los uniformados estén en una postura de desgano e insistió en que se está gestionando un curso de adiestramiento para nuevos egresados que se sumarán a este grupo operativo que patrulla las calles.
Ayer, agentes de la Policía Nacional llevaron adelante controles preventivos en la vía pública en horas críticas, realizando inspecciones de personas y vehículos en rutas y avenidas de zonas transitadas, así como en buses en la zona metropolitana.