03 nov. 2025

Monitoreo a vacunados se extiende por un año

Prueba.  La joven científica paraguaya trabaja como investigadora biomolecular, pero con cultivos de bacterias, no de virus.

Prueba. La joven científica paraguaya trabaja como investigadora biomolecular, pero con cultivos de bacterias, no de virus.

Mariana Noto es quizá una de las pocas paraguayas que ya se aplicaron una de las vacunas que se están desarrollando contra el Covid-19. La joven de 26 años de edad, desde setiembre de 2019, realiza un doctorado en Ciencias Biomédicas en la Escuela de Medicina de la Universidad de Massachusetts, Estados Unidos. Como en ese país ya están vacunando desde finales del año pasado, tuvo la oportunidad de aplicarse el vector de Pfizer BioNTech, junto a la comunidad científica que desarrolla investigaciones en esa casa de estudios. La primera dosis recibió el 22 de enero y ahora espera por la segunda que será el 12 de febrero. Cuenta que el pinchazo es casi imperceptible, al menos “me dolió menos que la vacuna contra la gripe, que me puse este año”.

Pero la principal diferencia es que el seguimiento a cada receptor es por un año. Al menos en EEUU. “Una vez que te ponen la vacuna te asignan automáticamente una cuenta en un software para hacer seguimiento, a saber si hay efectos secundarios. Eso se hace con el Centro de Control de Enfermedades de EEUU”, relata Mariana.

Todos los días le llega un mensaje que le dirige a una página web con sus datos y ahí le pregunta cómo se siente en general, si presenta algunos de las reacciones leves probables.

“Ese monitoreo continuará durante meses porque hay un poco más de efectos reportados después de la segunda dosis”, dice y explica que “el monitereo se da hasta cinco semanas después de la segunda dosis, después en tres, seis meses”.

“Y doce meses después de la última dosis nos contactarán para chequear cómo nos encontramos”, refiere lo que es el análisis final, a saber si no contrajeron Covid o no desarrollaron la enfermedad. Antes de que le pusieran la vacuna le preguntaron si tenía alergia a algunos de los componentes del biológico; si era inmunosuprimida o tenía algún problema en general.

“Te preguntan si ya tuviste Covid o no, aunque eso mucho no afecta porque igual recomiendan ponerse la vacuna si tuviste Covid. Te cuentan bien que aunque te aplicás la vacuna igual uno debe seguir practicando todas las medidas preventivas, como el uso del tabapocas”, suscribe.

Eso es así porque la inmunidad con la vacuna se consigue recién después de la segunda dosis.

“Toma un tiempo hasta que desarrolles inmunidad completa; todavía no hay datos si la primera dosis ya te da inmunidad de por sí. Lo que hay que hacer es esperar dos o tres semanas después de la segunda dosis y ahí ya estarías con la inmunidad”, dice.

EFECTOS

Cuenta que en EEUU cuando se agendan para la aplicación les envían todos los datos sobre los componentes de la vacuna, así como los efectos secundarios que uno puede desarrollar o no.

“Dependiendo de cómo respondés las preguntas que te hacen, antes de la vacuna, te quedás en observación 15 o 30 minutos después de la aplicación. Yo estuve quince”, indica y comenta que a ella no le produjo ninguna de las reacciones leves, salvo un poco de dolor muscular en el sitio de la inyección cuando levantaba el brazo, pero nada aparte de eso.

Tuvo compañeros de trabajo que se sintieron cansados, solo eso. “Yo confío en el sistema científico, pero estamos probando aún”, lanza y sostiene: “Moderna y Pfizer están basadas en el mismo principio que es una vacuna de RNA, una tecnología que no es nueva, pero es un principio superseguro. A diferencia de vacunas anteriores, donde te metían el virus atenuado, en este caso, no hay ninguna chance de adquirir la enfermedad”.