Por Justiniano Riveros
CONCEPCIÓN
Un militar mató a su camarada de la FTC y dejó heridos a dos disparándoles en la noche. El extraño incidente se produjo en la madrugada de ayer en el destacamento de seguridad de la FTC en la estancia Agüerito, distrito de Arroyito, donde un sargento 1º que, según evidencias, estaba ebrio disparó a sus compañeros.
El fallecido es el sargento primero Aníbal Flores Ramírez, oriundo de Mariscal Estigarribia, Chaco; recibió dos impactos de arma de fuego. Los heridos son los vicesargentos primero Pablo Damián Díaz (23) y Josué Barrios Morel (22); uno recibió un disparo en la clavícula y el otro en el pie. Ambos están fuera de peligro.
El sindicado de autor de los disparos es el sargento primero Francisco Rojas Barrios. Según testigos, durante su guardia estaba bebiendo caña con gaseosa y manipulando su arma reglamentaria. Incluso sus compañeros le advirtieron de lo peligroso que era ese juego.
Los dos heridos comentaron a la fiscala Liz Argüello que al ser las 3.00 de la mañana, fueron a despertar a Aníbal Flores Ramírez para tomar la guardia, pero en ese ínterin ya escucharon los primeros disparos. Segundos después, Rojas entró a la pieza y siguió disparando, momento en que hirió a los tres; luego salió al patio y realizó más disparos, testificaron ante la fiscala, quien mencionó que Rojas dio positivo a la prueba de alcotest y que en el lugar hallaron las evidencias de las bebidas alcohólicas.
El presunto victimario alegó en su defensa que a las 03.00 horas se le presentaron –supuestamente– tres a cuatro hombres armados y se dirigían hacía a él; por eso disparó varias veces y hubo intercambio de balacera, dijo.
Los heridos fueron evacuados hasta la Urgencia del Hospital Regional de Concepción, donde Aníbal Flores ya llegó muerto.
La fiscala Argüello anunció que imputó al uniformado por homicidio doloso y homicidio doloso en grado de tentativa y remarcó que falta definir qué acciones tomará la Justicia Militar . “El hombre se abstuvo de declarar y ya queda a cargo del juzgado definir su situación”, señaló.
Ayer temprano, el Comando de Seguridad Interna (CODI) precisó en un comunicado los datos de los involucrados, pero sin dar detalles de las circunstancias.
También se practicó la prueba de alcotest a los 7 militares y el único que dio positivo fue el supuesto victimario. Levantaron varias evidencias como vainillas servidas, cartuchos percutidos y no percutidos.