En una ceremonia celebrada en la fría noche de San Miguel de Tucumán (noroeste), en presencia de unos 700 invitados –entre ellos los ex mandatarios Mauricio Macri (2015-2019) y Adolfo Rodríguez Saá (2001) y el gabinete ministerial al completo–, Milei pudo completar su anhelada firma de un pacto “refundacional”, con el acompañamiento de otras fuerzas políticas, aunque debió esperar algunos meses más para ello.
En marzo pasado, en la apertura del año legislativo, el líder ultraliberal había lanzado su propuesta para firmar un programa con diez políticas “refundacionales y fundamentales para devolverle la grandeza a la nación”.
Su idea era rubricarlo el 25 de mayo, otra fecha de celebración patria en Argentina, pero no se logró porque había puesto como condición previa la aprobación de su ambicioso paquete de reformas económicas, conocido como ‘ley Bases’, que no alcanzó el aval del Parlamento hasta el pasado 28 de junio.
PUNTO DE INFLEXÍÓN. ”La Argentina se encuentra ante un punto de inflexión. Los puntos de quiebre en la historia de una nación no son momentos de paz y tranquilidad, son momentos de dificultad y conflicto, donde todo parece cuesta arriba. Son momentos en los que el abismo se hace tan claro que el cambio se convierte en una obligación y una urgencia”, indicó Milei durante su alocución ante la Casa Histórica de San Miguel de Tucumán.
La firma coincidió con el inicio del 9 de julio, día en que se celebra la Independencia argentina, declarada en 1816 en esa misma ciudad, lo que dio una pátina simbólica de unidad política a esta ceremonia. Milei resaltó que “parece un sueño lejano” pensar en “la época dorada” que vivió Argentina después de la Constitución Nacional original de 1853, basada en los principios liberales de Juan Bautista Alberdi, uno de los pensadores más importantes e influyentes del siglo XIX, a quien el mandatario suele citar como referente.
“Igual de lejano, incluso imposible” pareció que líderes políticos opositores se reunieran en Argentina en un acto como el de este martes, indicó el presidente, quien agradeció “la grandeza” de todos los participantes. El objetivo del pacto es “sellar los acuerdos básicos para sacar a la Argentina adelante”.
Los cinco primeros puntos son la inviolabilidad de la propiedad privada; el equilibrio fiscal innegociable; la reducción del gasto público a niveles históricos, en torno al 25% del producto bruto interno; una educación inicial, primaria y secundaria “útil y moderna, con alfabetización plena y sin abandono escolar”, y una reforma tributaria “que reduzca la presión impositiva, simplifique la vida de los argentinos y promueva el comercio”. La ceremonia estuvo cargada de simbolismo, pues se celebró en el Salón de Jura de la Casa Histórica de la Provincia de Tucumán, donde se firmó el Acta de Independencia de Argentina y donde estaba presente el ejemplar original de la Constitución de 1853.