El presidente Mario Abdo Benítez felicitó el trabajo y la estrategia de la defensa del Estado, encabezada por el procurador general, ante la Corte Interamericana de Derechos Humanos en el caso Arrom-Martí, tras su arribo a nuestro país, luego de presenciar in situ la audiencia pública del pasado jueves. “Los miembros de la Corte IDH entendieron que está en el deber moral del presidente de la República estar en defensa de los intereses de la nación. Desde la distancia sentimos el gran apoyo en la defensa de una causa que nos unió y nos debe seguir uniendo como paraguayos. Felicito el trabajo de la defensa, se hizo una estrategia, la Procuraduría y Fiscalía, habían 30 minutos y se concentró la defensa en desvirtuar los argumentos de la Comisión, se hizo una estrategia de destruir los argumentos en contra del Estado utilizando no solamente las referencias históricas, sino la jurisprudencia de como la Corte Interamericana actuó en casos similares, fue un debate técnico jurídico, no fue un debate donde quisimos demostrar un acto novelesco”, expresó el jefe de Estado anoche en el espigón presidencial.
Alegatos. Por su parte, el procurador Sergio Coscia dijo estar conforme. A criterio suyo, fueron muy claros con los alegatos y “se destruyó el argumento de la demanda”. Explicó que básicamente trabajaron la defensa en tres líneas: Una, en que no se configuran todos los elementos de la tortura, de la que acusan al Estado. Dos, en demostrar que las dos jurisprudencias aplicadas por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) al caso contra Paraguay, no corresponden. La tercera línea de defensa que siguieron es mostrar a la Corte IDH que la finalidad de la denuncia de Arrom y Martí no es el reclamo de un resarcimiento por violación de sus derechos humanos, sino económico.