LSD (dietilamida del ácido lisérgico) o ácido, como mayormente se conoce, es una droga psicodélica y potente asociada a las fiestas electrónicas, debido al efecto que genera en el consumidor. En la actualidad, en la noche asuncena esta droga ya acapara el gusto de los consumidores, pero aún sigue siendo poco conocida por las autoridades de seguridad, ya que se trata de una sustancia impregnada en un papelito. Sin embargo, su peligrosidad es bastante alta, ya que el consumo de varias dosis o mezclarla con otras sustancias podría ser fatal.
Existe un antecedente de un joven de 21 años, quien falleció a consecuencia de una sobredosis durante una fiesta electrónica en un local de eventos en Asunción. Según un informe médico, el infortunado joven mezcló varias sustancias esa noche, entre ellas estaría el ácido, éxtasis y cerveza. Ocurrió en la madrugada del pasado 21 de marzo.
La fiesta a la que asistió se denomina Mental Paraguay, que según dos personas que accedieron a una nota con este medio, y que alguna vez asistieron a uno de varios de estos eventos, el nombre mismo de la fiesta sugiere que la temática sea llevada desde un control o descontrol mental.
Nuestros entrevistados, a quienes les damos nombres ficticios –como Lucas y José, para preservar sus identidades–, mencionaron haber probado en varias oportunidades el ácido. Las veces que lo consumieron fueron en fiestas electrónicas y solamente en una oportunidad en la casa de uno de los amigos. “Es para un momento donde tiene que haber música fuerte y luces, así te pega más. Te lleva a otro mundo. Las luces están por todas partes, se te llena de colores y no podés parar de saltar, bailar, no te cansás...”, definió José sobre su experiencia con el LSD.
Mientras que Lucas fue más expresivo. “El mundo se te cambia en un segundo. Nada es normal. Todas las cosas que están a tu alrededor cambian de forma, como si fueras que estás en varios lugares al mismo tiempo, saltando de un sitio a otro. Las paredes se abren, las luces cambian todo”, relató el joven y dio un detalle más: “Eso sí, tenés una sed tremenda, tu cuerpo te pide agua a cada rato”.
Los costos. Explicaron que una dosis se consigue a partir de G. 80.000. Esta consiste en un corte de un pequeño cartón con dos gotas de LSD, que se coloca en la lengua. También se consigue el cartón de cuatro gotas, pero el precio varía entre G. 100.000 y G. 120.000. Incluso, se venden por goteros que contienen unas 50 gotas, con un costo aproximado de un millón de guaraníes.
En este caso, el consumidor se coloca las dosis en el ojo, una gota en un solo ojo y su efecto es más rápido.
También mencionaron que aún son pocos los lugares, donde se pueden adquirir las dosis de la droga, “pero en el centro (de Asunción) de una conseguís”, coincidieron los dos.
POCO CONOCIDO. Para las autoridades encargadas en la lucha contra la comercialización, el control y la prevención del consumo de drogas en nuestro país, el LSD aún es poca conocido. Esto refleja los antecedentes de sus procedimientos. Los registros demuestran que en Asunción, este alucinógeno aún no fue encontrado, ni requisado.
En las pocas veces que se encontró dosis de ácido, sus hallazgos se dieron en procedimientos realizados en los departamentos de Alto Paraná y Amambay.