El senador Líder Amarilla decidió dar su apoyo a la candidatura de Éver Villalba para presidir el partido, con lo que intensifican su interna contra el Nuevo Liberalismo, liderado por el gobernador de Central, Ricardo Estigarribia, que postula al intendente de Fernando de la Mora, Alcides Riveros, para la presidencia del directorio.
Los dos senadores sellaron su alianza en un acto con la dirigencia de Central en Capiatá, y conformaron un acuerdo al que llamaron Frente Radical, que se da con la unión del movimiento Integración Liberal, de Amarilla, y Corriente de Renovación Liberal, de Villalba.
Este sector opositor a Estigarribia está integrado además por el diputado de Ñeembucú, Diosnel Aguilera; de Misiones, Arnaldo Valdez; de Central, Billy Vaesken, entre otros.
Villalba es uno de los senadores con una oposición más frontal al Gobierno. En su discurso criticó la gestión del presidente Santiago Peña.
“Nos está llevando al abismo y pretende distraernos colgándose del deporte. Pero nosotros sabemos la verdad, que las familias paraguayas ya no pueden permitirse lo básico. Un kilo de carne, símbolo de dignidad, se ha vuelto un lujo inalcanzable para muchos”, resaltó.
El legislador además es disidente al oficialismo partidario liderado por el actual presidente Hugo Fleitas. No solo confronta en su interna en el partido, sino en la misma oposición, ya que no se adhiere a ningún acuerdo para las elecciones municipales y para las generales.
El consenso al que llegaron los referentes de la oposición para la intendencia de Asunción, que acordó postular a un solo candidato, no tiene el respaldo del grupo de Villalba, quien incluso critica a Kattya González. “El Partido Liberal va a resolver sin injerencia sus cuestiones internas. No van a venir Cartes, Marito ni Kattya a dictarnos cátedra dentro del PLRA. Y no olvidamos el desprecio que la ex legisladora tuvo hacia los liberales en las campañas anteriores”, manifestó.
Villalba busca lograr el control del partido y encabezar la oposición, para lo que deberá confrontar fuertemente al Nuevo Liberalismo, que ya es el movimiento más grande dentro del PLRA. El senador apunta a ser una opción y su discurso se orienta hacia el sector popular, contra la pobreza y las desigualdades.
“Es por eso que somos radicales, porque miramos de frente al poder y lo señalamos; porque no nos callamos ante la desigualdad ni ante el intento de destruir la democracia. El PLRA necesita un partido comprometido, con autoridad moral para ser alternativa real”, lanzó.
Amarilla en tanto considera que se trata de una alianza estratégica su acuerdo con Villalba, ya camino al 2028.
“En Capiatá sellamos una alianza estratégica que abre el camino a la unidad del PLRA para organizarlo y levantarlo, con miras a ganar las municipales 2026 y proyectar un Paraguay de oportunidades en 2028”, expresó.
Líder busca ser miembro del directorio y dará su apoyo a Villalba para que llegue a la presidencia del partido.
En este bloque se encuentra además el ex presidenciable Efraín Alegre. El sector es incluso más cercano a la alianza conformada por Paraguayo Cubas, denominada Acuerdo Guaraní , que al acuerdo opositor que tiene a los principales referentes.
SATÉLITES. Las diferencias de este grupo con la oposición son muy marcadas. La reciente aparición de Alegre y su sugerencia de usar el padrón nacional en la interna opositora a pesar de estar prohibido por la ley, le valió la crítica de Kattya, que le calificó como satélite al igual que a Payo Cubas.
Indicó que mientras la oposición unida intenta trazar una hoja de ruta y apuntalar los desafíos, Efraín llega de forma solitaria a disociar.
“¿Y quién le sigue la corriente?, el otro psicópata”, expresó con referencia a Payo, quien apoyó la idea del liberal, mientras opera de forma paralela con su propio grupo.
Kattya no tiene ninguna candidatura aún, pero su nombre sonó como posible para la intendencia de Asunción, aunque luego fue descartada.
EL NUEVO LIBERALISMO. El movimiento de Estigarribia en tanto no para su actividad proselitista. Pese a la confrontación interna, buscan la unidad, y Riveros ya anunció que el objetivo es lograr 100 intendencias liberales en el 2026.
El Nuevo Liberalismo sumó recientemente al intendente de Villarrica, Magín Benítez; también a la diputada Graciela Aguilera, de Cordillera, como a la diputada María Constancia Benítez.
Estigarribia llegó a un acuerdo recientemente con Hugo Fleitas de no confrontación. El año pasado, en una cuestionada convención, se aprobó realizar elecciones anticipadas del directorio, con el fin de descabezar el partido y apurar que Riveros asuma en el cargo.
Actualmente, tanto Estigarribia como Fleitas conforman el bloque opositor que busca la intendencia de Asunción con una candidatura de consenso. Los candidatos son cuatro, y uno solo deberá permanecer. Son Soledad Núñez, Johanna Ortega, Álvaro Grau y Agustín Saguier.
El sector de Éver Villalba no forma parte, incluso rechazaron la decisión de Fleitas de incluir al PLRA.
El senador Dionisio Amarilla también se postulará a la presidencia del Partido Liberal Radical Auténtico (PLRA), tras ser expulsado por votar junto con otros senadores por la pérdida de investidura de Kattya González, y reincorporado por el Tribunal Superior de Justicia Electoral (TSJE). Amarilla representa al sector liberocartista, que opera directamente con Honor Colorado. Su movimiento se denomina Diálogo Azul. “Más firme que nunca rumbo a la toma de la responsabilidad de presidir al gran Partido Liberal Radical Auténtico, el gigante dormido a quien haremos de vuelta una fuerza imposible de detenerla. Vamos por despertar al gigante dormido. Vamos por la presidencia del PLRA. Justicia al fin”, expresó. En el Senado, Dionisio opera junto con Hermelinda Alvarenga, Édgar López y Noelia Cabrera. Todos fueron expulsados por su conexión con el cartismo y por votar contra Kattya el año pasado, pero actualmente integran nuevamente el partido. Cabrera también protagonizó varios escándalos. Recientemente, dos sobrinos suyos tuvieron que renunciar como funcionarios del Senado porque eran planilleros. Cobraban altos salarios sin trabajar, ya que cumplían funciones en el estudio jurídico de la pareja de la legisladora. Cabrera también fue cuestionada por usar una camioneta de Senabico con fines personales como actividades proselitistas.