Paraguay cuenta con condiciones sanitarias suficientes para iniciar el proceso de levantamiento de la vacunación contra la fiebre aftosa, destacó Hugo Idoyaga, ex presidente del Senacsa y delegado paraguayo ante la Organización Mundial de Sanidad Animal (OMSA). Aunque advirtió que no se trata de una decisión inmediata ni unilateral, sino de un camino que exige planificación, consenso y garantías para los productores.
“Un levantamiento de la vacunación no es simplemente dejar de vacunar. Es un proceso complejo que implica medidas paralelas y respaldo institucional”, destacó Idoyaga en entrevista con Última Hora.
El especialista explicó que uno de los principales puntos a resolver, antes de levantar la vacunación, es la indemnización a productores en caso de brotes, ya que un evento sanitario puede ocurrir tanto en un escenario con vacunación como sin ella.
“El productor debe tener garantizados los fondos para salvaguardar su trabajo y su producción. Estamos hablando de dinero y de estabilidad económica”, subrayó Idoyaga.
Zonificación. El especialista recordó que, en caso de detectarse un foco de aftosa en un país libre sin vacunación, la OMSA dispone de herramientas como la zonificación y compartimentación. Estas medidas permiten delimitar un área de contención, restringir allí el comercio y mantener la operatividad en el resto del territorio. “Esto brinda flexibilidad y rapidez para recuperar el estatus sanitario y evitar el cierre total de mercados, como ocurre actualmente ante cualquier brote”, apuntó.
Ventaja comercial. Según Idoyaga, alcanzar la categoría de país libre sin vacunación representaría una señal de confianza internacional y abriría puertas a mercados que hoy todavía observan a Paraguay “con recelo”.
“Hoy vendemos bien porque existe una coyuntura de escasez mundial de carne, pero eso no siempre fue así. Con el estatus superior estaríamos en condiciones más competitivas y con mayor previsibilidad”, afirmó.
El proceso de levantamiento de la inmunización del ganado contra el mal también exige definir el manejo de las vacunas. Idoyaga mencionó al respecto que los países que avanzan hacia el retiro de la inmunización mantienen bancos regionales de antígenos y estrictos sistemas de bioseguridad para garantizar provisión en caso de emergencias.
Asimismo, enfatizó que el camino debe construirse con diálogo: “No se trata de posiciones extremas de ‘sí’ o ‘no’. Es una tendencia mundial y tarde o temprano tendremos que iniciar el proceso. Lo importante es hacerlo con un plan consensuado, sin improvisaciones”, recalcó el ex presidente de Senacsa.
Consultado sobre la posibilidad de que la campaña de 2026 sea la última con vacunación, Idoyaga fue cauto. “Con las condiciones actuales, lo veo difícil. Ojalá se pudiera, pero el tiempo es insuficiente para cumplir con todos los requisitos. Quizás el siguiente periodo, entre 2027 y 2029, pueda ser más factible”, opinó.
Sigue el debate con gremios sobre retiro de la inmunización
El presidente de la Cámara Paraguaya de Carnes (CPC), Randy Ross, junto a representantes del gremio, se reunió con autoridades del Senacsa para avanzar en el debate sobre el futuro de la vacunación contra la fiebre aftosa.
Ross calificó este proceso como “una señal de madurez institucional” y destacó que busca fortalecer el estatus sanitario de Paraguay y su imagen internacional, generando mayor confianza en los mercados globales. Por su parte, el gerente de la CPC, Daniel Burt, remarcó que la expansión internacional de la carne paraguaya fue posible gracias a decisiones basadas en criterios científicos y subrayó la importancia de que el debate continúe con apertura, consenso y profesionalismo, para asegurar la competitividad y sostenibilidad del sector a largo plazo.