Carlos Elbo Morales
Muuuuuy beneficiosa. La leche, sobre todo de vaca, y sus derivados representa un alimento aliado para el desarrollo. Sobre todo en los niños. Particularmente ayuda a combatir dos problemas que hoy se presentan en un extremo y otro: La desnutrición y el sobrepeso y obesidad.
Rodrigo Valenzuela, máster en Nutrición de Alimentos y técnico investigador a tiempo completo en la Universidad de Chile, resalta el valor nutritivo de la bebida láctea para hacer frente a estos dos problemas. “La leche es un alimento muy nutritivo. Aporta proteínas, grasas fundamentales, hidratos de carbono, vitaminas y minerales. Además favorece el crecimiento y desarrollo del cerebro”.
Refirió que el consumo de este alimento es muy importante, sobre todo para las embarazadas y niños. Agrega que al consumir este alimento, la desnutrición rápidamente desaparece.
“A la vez se asegura un mejor sistema inmunológico y mejor desarrollo. En los niños que toman leche, se observan menos cuadros infecciosos, como diarreas, durante el verano y menor cantidad de problemas respiratorios en invierno”.
Entre otras causas, la poca o nula consumición de leche es aliada de la desnutrición. Según los datos dados por el experto, la crónica se sitúa entre el 5% y 7%, en varios países de las Américas, entre ellos Paraguay. La aguda promedia el 20%. En Guatemala el índice llega al 50% entre los niños.
El nutricionista infantil disertó sobre estos temas en el Congreso Latinoamericano de Pediatría (Alape) 2018. El evento se realizó en el Centro de Convenciones de la Conmebol y participaron pediatras de varios países.
OBESIDAD. Valenzuela menciona que hace 40 años Chile lleva adelante una política pública y privada para incentivar el consumo de la bebida producida por la vaca. A través de esta medida, el nivel de desnutrición infantil no supera el 1%. Este alimento ayuda a hacer frente al otro extremo de un problema de salud actual: El sobrepeso y la obesidad.
“Vimos que los niños que consumen más leche, toman menos gaseosas, ingieren menos comida chatarra. Son niños que acumulan menos grasas en el cuerpo”.
El experto señala también que además de leche, se pueden consumir otros derivados como quesos y yogures. Explicó que las bebidas derivadas de la cabra y la oveja también tienen su aporte nutricional. Pero la de vaca es más masiva y accesible.
Agregó que para el niño, el ideal de consumo al día tiene que rondar el medio litro, aproximadamente.
La leche debe consumirse, sobre todo sin azúcar. De lo contrario puede producir obesidad y caries. Rodrigo Valenzuela, nutricionista infantil.
El error de elegir la bebida láctea
En los supermercados, a la par de la leche también se ofrece la bebida láctea. Debido a su costo menor, muchas personas optan por ella. Sin embargo, Valenzuela señala que este producto solo tiene una pequeña parte de leche. “Eso varía de un país a otro. Le agregan suero lácteo. También le ponen agua, mucha azúcar lamentablemente. Esa no es la leche que potenciamos su consumo. Eso ya no es leche, es jugo con algo de leche”.