18 dic. 2025

Las proyecciones alientan a una recuperación de la soja

En el 2020 Paraguay no solo se recuperará de la caída de la producción y exportación de soja, sino que superará en 2,8% a la campaña 2017-2018, según las proyecciones del Departamento de Agricultura de Estados Unidos.

De acuerdo con las estimaciones, el país colocará en el mercado internacional 6,2 millones de toneladas de granos de soja, por encima de las 5,5 millones de ton. enviadas este año, lo que representa una diferencia de casi un millón de ton. a favor de la producción sojera.

Se observa entonces que en el 2020 el sector no solo se recuperará de las cifras negativas, sino que tendrá un leve crecimiento con relación a la campaña 2017-2018, cuando se lograron vender en el exterior 6,03 millones de toneladas.

Estos números difieren poco con los análisis de la Cámara Paraguaya de Exportadores y Comercializadores de Cereales y Oleaginosas (Capeco), que cree que las exportaciones llegarán a 6,4 millones de toneladas, según el presidente del gremio, José Berea.

Motivos. Las sequías ocasionaron que la producción no alcance siquiera las 9 millones de toneladas de granos este año, lo que a su vez repercutió en una merma de las exportaciones. Pero todo apunta a un periodo de bonanza en el 2020, pues las lluvias están colaborando con el desarrollo de las plantas.

“Estamos viendo que los cultivos están en un estado muy bueno a óptimo en algunos casos, eso nos hace pensar en una campaña que podemos volver a pasar bien las 10 millones de toneladas”, expresó Berea.

El analista económico Amílcar Ferreira coincide con las proyecciones de recuperación, debido a que el clima estuvo acompañando relativamente la siembra, pero también apunta a superar la campaña 2017-2018, atendiendo a que las plantaciones se extienden ahora también en el Chaco. “Puede haber incluso un posible crecimiento, en eso coincido (con el informe de Estados Unidos”, expresó.

Precios. En la bolsa de Chicago la soja cotiza a USD 353,8 por tonelada, que de acuerdo a los sojeros aún no es suficiente para cumplir con los productores, que piden en finca USD 300, mientras que por el momento reciben entre USD 280 y 290, detalló Berea.

Ferreira, por su parte, considera que los precios pueden incluso bajar cuando Estados Unidos vuelva a enviar soja a China, cuando ambos países concreten su acuerdo.

Exportaciones. El último informe de Capeco, que analiza los envíos entre enero y octubre, indica que Argentina es el principal destino de la soja paraguaya con un 70% de participación, le sigue Rusia en segundo lugar y la Unión Europea con el 10%.

Molienda. En cuanto a la industrialización de los granos, el informe de Estados Unidos sostiene que se mantendrá en 3,98 millones de toneladas, mientras que Capeco indica que será de 3,6 millones de ton.

También a raíz de una menor producción, la molienda arrojó números negativos este año. Al cierre de octubre se registraron 200.000 ton. menos de soja procesada, con relación al mismo periodo que el 2018. Los granos se convierten en aceite, harina y cascarilla, pero son más difíciles de exportar que los granos, debido a los aranceles que pesan sobre los productos agroindustriales en el mercado internacional.


No cesará la presión para conseguir el mercado chino
Al igual que los productores y exportadores de carne, el sector sojero advierte que seguirá insistiendo con la apertura de China como destino de la oleaginosa.
“China es el principal mercado que queremos abrir, nosotros ya tenemos bastantes mercados abiertos”, dijo José Berea.
De hecho, países vecinos como Argentina destinaron gran parte de su producción al gigante asiático durante la guerra comercial con Estados Unidos.
Ahora que ambos países llegan a un nuevo acuerdo, los exportadores argentinos tendrán que rebuscarse entre otros clientes.
Esta situación se suma a las retenciones del 30% sobre las exportaciones de granos en estado natural que decretó el nuevo presidente Alberto Fernández. La medida desencadenó en tractorazos por parte de los productores. De momento, estas retenciones no afectan a Paraguay, a menos que se tomen otras decisiones proteccionistas.
En cuanto a la molienda, del total de la soja paraguaya en estado natural exportada, la Argentina compra el 70% de esa producción para convertirla en aceite. Con ese valor agregado coloca nuevamente el producto en el exterior.