La iniciativa ya cuenta con autorización de la Intendencia Municipal y se denomina Proyecto de Huertas Comunitarias y Familiares Tembi’urã, que será desarrollado por la Dirección de Gestión Ambiental. De acuerdo con las proyecciones, el objetivo es crear tres huertas comunitarias y 50 huertas familiares por mes hasta diciembre. Desde la institución municipal se informó que se promueven las huertas comunitarias como una alternativa de producción alimentaria y de mejora de los hábitos de consumo de los miembros de una comunidad.
Se busca el fortalecimiento del trabajo en equipo como las mingas que son utilizadas como mecanismo de ayuda recíproca. Del huerto se obtienen alimentos ricos en vitaminas y minerales, como son las hortalizas y proteínas de los rubros de autoconsumo, como una forma sustentable de hacer frente a la aguda crisis económica que sufre la ciudad.
SANOS Y ORGÁNICOS. Según las estimaciones de los responsables del proyecto, se busca beneficiar a unas 1.500 familias de diferentes barrios de la capital departamental, que suman más de 50 vecindarios.
Los mismos vecinos serán involucrados en el proyecto para darle sustentabilidad, para lo cual contarán con asesoramiento técnico y apoyo para la creación de huertas de autoconsumo, que les permitirán acceder a alimentos sanos y orgánicos. El beneficio consiste en un ahorro económico que en estos tiempos de crisis permitirá una mejora sustancial en la alimentación y el desarrollo económico de las familias que serán favorecidas, como también la adquisición de nuevos conocimientos en la producción de hortalizas sanas y frescas que podrán ser replicadas en sus hogares.
“El proyecto contempla una metodología educativa que consistente en actividades de aprendizaje e intercambio de conocimientos y experiencia, a través de charlas teórico-prácticas que serán dirigidas a los interesados”, refiere un comunicado de prensa oficializando el proyecto que ya está en marcha.
Se planifica realizar dos encuentros mensuales. Los temas a ser abordados abarcan desde la preparación de suelo, siembra, cuidados culturales, cosecha, poscosecha, instalación de sistema de riego, preparación de insecticidas orgánicos y repelentes, de manera teórica y práctica. Las capacitaciones estarán a cargo de los técnicos de la División de Proyectos y Educación Ambiental y la División de Áreas Protegidas, dependientes de la Dirección de Gestión Ambiental. El proyecto está a cargo de los jefes de estas divisiones, Aníbal Molas y Ema Godoy.
La Intendencia autorizó el proyecto con una observación, en el sentido de que sean consideradas como prioridad las comunidades indígenas de Ciudad del Este. El vivero municipal, que fue reactivado, es donde se preparan los plantines para las huertas.