07 may. 2024

Lara Bareiro, el gran músico desperdiciado

Después de los días de sangre de la guerra civil de 1947, el jinete del apocalipsis de la intolerancia cabalgó sobre la desolada patria. <br>Mientras los ta?ýra de Bernardino Caballero se afianzaban en el poder, perseguían sin cuartel a los derrotados y a cualquiera que fuese sospechoso de no comulgar con la barbarie desbocada, el músico Carlos Lara Bareiro estudiaba violín, armonía, contrapunto, fuga, dirección orquestal y composición en la Escuela Nacional de Música de la Universidad del Brasil, en Río de Janeiro. Itamaraty le había otorgado una beca de ocho años para dominar los secretos del compás más inocente hasta la excelsa maravilla de una sinfonía.<br>El sueño de Lara Bareiro era que el Paraguay ?como otras naciones? tuviera una sinfónica nacional. Ya desde finales de la década de 1930 le rondaba la cabeza esa idea. Y la expresaba no solo en la Asociación de Músicos del Paraguay (AMP), de la que fue presidente durante tres periodos, sino en cuanto espacio estuviese a su alcance.<br>Cargado de conocimientos teóricos y prácticos que en el Paraguay, en 1951, nadie tenía, regresó a su aldea. Quería compartir su arte y su ciencia, sobre todo con los jóvenes.<br> En contacto con maestros de primer nivel, compañeros talentosos y un ambiente abierto a lo universal, volvía con una mentalidad diferente. <br> Si bien la turbulencia local se había calmado, el panorama no era muy distinto al que había en el tiempo inmediatamente posterior a la lucha fratricida. El fuego de la violencia continuaba encendido. <br>En esa atmósfera cargada es que el maestro insistía en su monotema: crear la sinfónica del Paraguay. O, al menos, de la Municipalidad de Asunción. La AMP lo seguía apoyando de manera incondicional. La cosa era encontrar en el Gobierno de Federico Chaves un canal adecuado para cristalizar el deseo.<br> Recorriendo oficinas públicas y conversando con los hombres públicos de la época, encontró muchas puertas abiertas, pero el resultado final fue negativo. Para ello, la influencia del que por entonces era jefe de Policía ?también músico?, Epifanio Méndez Fleitas, fue decisiva. En su autobiografía, Lara Bareiro detalla minuciosamente lo ocurrido.<br> Cuando se dio cuenta de que pedía naranjas al guayabo, conformó la Orquesta de la AMP. Bajo su dirección, recorrió buena parte del país. <br> Lara Bareiro no solo no era colorado ?en cuyo caso su iniciativa hubiera sido mirada con otros ojos?, sino que pertenecía al Partido Comunista. Era, además, del Movimiento de la Paz Mundial, integrado por grandes personalidades de la izquierda o con ideas progresistas. La “guerra fría” norteamericana y la política local se volvieron calientes para él. Por eso, su confinamiento en Fuerte Olimpo primero y su destierro después, en 1955, fueron ?desde la “lógica” en marcha? naturales.<br>En 1957, con la creación de la Orquesta Sinfónica de la Ciudad de Asunción (OSCA), se concretó su sueño. Él, sin embargo, moriría el 21 de setiembre de 1987, en Buenos Aires, sin poder regresar nunca a su patria.<br>El Paraguay ?a través del ejercicio militante de la intolerancia de los responsables de su expulsión? se privó de los beneficios que la extraordinaria formación de Carlos Lara Bareiro pudo haberle traído. <br>Sus cenizas tienen que recordarnos ?una vez más? que hay que luchar para que situaciones de esa naturaleza nunca se repitan.<br> <br>

Más contenido de esta sección
Las ventas al público en los comercios pyme de Argentina cayeron un 25,5% interanual en febrero pasado, golpeadas por la pérdida de poder adquisitivo de los consumidores a causa de la elevadísima inflación, y acumulan un declive del 27% en el primer bimestre del año, según un informe sectorial difundido este domingo.
El mandatario decidió crear el fondo nacional de alimentación escolar esperando un apoyo total, pues quién se animaría a rechazar un plato de comida para el 100% de los niños escolarizados en el país durante todo el año.
Un gran alivio produjo en los usuarios la noticia de la rescisión del contrato con la empresa Parxin y que inmediatamente se iniciaría el proceso de término de la concesión del estacionamiento tarifado en la ciudad de Asunción. La suspensión no debe ser un elemento de distracción, que nos lleve a olvidar la vergonzosa improvisación con la que se administra la capital; así como tampoco el hecho de que la administración municipal carece de un plan para resolver el tránsito y para dar alternativas de movilidad para la ciudadanía.
Sin educación no habrá un Paraguay con desarrollo, bienestar e igualdad. Por esto, cuando se reclama y exige transparencia absoluta en la gestión de los recursos para la educación, como es el caso de los fondos que provienen de la compensación por la cesión de energía de Itaipú, se trata de una legítima preocupación. Después de más de una década los resultados de la administración del Fonacide son negativos, así como también resalta en esta línea la falta de confianza de la ciudadanía respecto a la gestión de los millonarios recursos.
En el Paraguay, pareciera que los tribunales de sentencia tienen prohibido absolver a los acusados, por lo menos en algunos casos mediáticos. Y, si acaso algunos jueces tienen la osadía de hacerlo, la misma Corte Suprema los manda al frezzer, sacándolos de los juicios más sonados.
Con la impunidad de siempre, de toda la vida, el senador colorado en situación de retiro, Kalé Galaverna dijo el otro día: “Si los políticos no conseguimos cargos para familiares o amigos, somos considerados inútiles. En mi vida política, he conseguido unos cinco mil a seis mil cargos en el Estado...”. El político había justificado así la cuestión del nepotismo, el tema del momento.