En el mes de octubre, el Mades constató que la empresa, dedicada a pelambre de cuero, seguía operando en horario nocturno, a pesar de tener la licencia cancelada. Además del sonido del motor quedó en evidencia que desde el muro había filtración de efluentes y olor nauseabundo dirigiéndose hacia la laguna teñida de rojo desde hace meses.
Los estudios laboratoriales habían arrojado alta concentración de químicos utilizados para conservante de cuero.
La laguna también sufrió un considerable impacto previo tras dividirse para un camino de tierra impulsado por empresarios de la comisión Pro Camino Industrial.
El sumario en el Mades contra el grupo duró más de un año. Concluyó recién al cobrar trascendencia internacional la situación de la laguna. Como argumento desde el ente señalan que aprobaron la obra porque en la declaración jurada no figuraba la existencia de la laguna.
Recién tras la imputación de la directora de Evaluación Ambiental del Mades, Carolina Pedrozo, el ente anuncia sumario contra el consultor que presentó el proyecto.
EMPRESA. La escribana Herminia Paredes se comunicó con este diario para informar que fue contratada por la firma Waltrading SA para realizar toma de muestra del agua que enviará a la Argentina para su análisis. Señaló que en diez días tendrían los resultados.
Indicó que desde la empresa en cuestión buscan demostrar que no contaminaron la laguna, sino otras firmas del entorno, como la curtiembre Lecom SA.