Indicó que le llamó a la senadora Lilian Samaniego, presidenta de dicha instancia legislativa, a quien están pidiendo que se aceleren las gestiones. Señaló que todas las instituciones debían enviar sus propuestas, pero no todas habrían cumplido.
“Se pidió que cada institución envíe sus requerimientos y los problemas legales, pero no todos cumplieron. Tenemos a los que ya enviaron, pero hay sectores e instituciones del Estado que no lo hicieron”, enfatizó.
Añadió que cada instancia debe especificar las trabas y necesidades que tienen actualmente en materia legal para ser más efectivos en la lucha contra el contrabando. Subrayó que el estudio va a llevar su tiempo y habrá que ver cuándo logran cerrar para su tratamiento y sanción.
A fines del año pasado, gremios industriales y empresariales habían acordado en reunión cumbre con ministros y directores de instituciones vinculadas a la lucha anticontrabando elaborar una ley que sea más flexible y permita accionar con mejores resultados en el combate a la práctica ilegal.
La reunión se dio en momentos en que arreciaban denuncias de sectores formales debido al volumen extraordinario de productos ilegales que ingresaban desde Brasil y Argentina, en especial de este último país.
La senadora Samaniego había explicado que el eje central del proyecto apunta a endurecer las penas por contrabando, también el de cerrar locales que comercializan productos ingresados ilegalmente, como también vincularlos a posibles hechos de lavado de dinero.
Manifestó que la idea es tener una ley moderna, dura y que aumente las penas para los que se dedican al contrabando y no haya dudas a la hora de que sean aplicadas.
A modo de ejemplo, refirió que una de las propuestas es establecer el cierre inmediato de locales que vendan productos de contrabando y ya no puedan volver a abrir. Además de establecer la pena carcelaria para reincidentes en el ilícito.
Según anunciaron, durante la reunión se tratará de tener el proyecto listo lo antes posible. Incluso, no descartaron pedir la convocatoria a sesión extraordinaria para sancionar la nueva normativa.
COMPLICADO. Por otra parte, en el sector industrial y empresarial ven un complicado panorama este año en la lucha contra el contrabando, a partir de que la devaluación de la moneda argentina no para y resulta cada vez más difícil competir.
Incluso, la diferencia de precios podría crecer, a partir de que en nuestro país se anuncia nuevamente la suba de las naftas y del gasoil a partir de febrero.
Esto volvería a generar una nueva suba generalizada de precios de productos de la canasta básica, a partir de la incidencia que tiene el gasoil común en la economía. En zonas fronterizas con Argentina aumentaron las ventas de combustibles de contrabando en bidones. Según se pudo observar, tanto en las naftas como en el gasoil, son entre 1.500 y 2.000 guaraníes más baratos que en nuestro país.
La ciudadanía no para de reclamar a través de las redes sociales por el encarecimiento de la carne y de productos frutihortícolas.
Igualmente, surgen voces que alientan acudir a Puerto Elsa, frontera con Clorinda, Argentina, a realizar las compras de productos de la canasta básica. En contrapartida, los gremios industriales y empresariales piden a la ciudadanía que apuesten por productos nacionales, porque estos son los que hoy están dando puestos de trabajo.
La Cámara Paraguaya de Supermercados (Capasu) tuvo relativo éxito el año pasado con una campaña de abaratamiento de unos 300 productos, a fin de tratar de competir con los productos de contrabando.