“Yo, la verdad que estoy convencido de lo que hice y no tengo ningún tipo de arrepentimiento”, fue lo que dejó sentado Daniel Garnero, entrenador de Olimpia, luego del 1-1 y la eliminación en los octavos de final de la Copa Libertadores a manos de la Liga de Quito.
Esta fue la segunda experiencia del adiestrador franjeado en la mencionada competencia, la cual hasta ahora le ha dejado un sabor amargo, más allá que seguramente le sirve como experiencia para seguir creciendo (ver info).
en la 2. En la competencia del año pasado, la eliminación de Olimpia fue mucho más dolorosa, pues se originó en la fase 2 de la Libertadores, frente al Junior de Barranquilla.
En la fase 1, el Decano eliminó al Montevideo Wanderers, con el que empató 0-0 en la ida y lo superó 0-2 en la vuelta. Después de eso enfrentó al Junior colombiano y quedó eliminado en la fase 2, a orillas de la anhelada fase de grupos al caer por 3 a 1.
para adentro. A partir de ahora, el actual tricampeón del torneo local, debe enfocarse a las dos competencias del plano local, el torneo Clausura, donde buscará obtener el tetracampeonato, y la Copa Paraguay, en la que va por la revancha tras perder la final de la edición pasada frente a Guaraní.
La primera final a partir de hoy para el equipo de Daniel Garnero será el lunes, cuando enfrente a Libertad desde las 19.15 en el Defensores.
