Según el comisario Ignacio Muñoz, director de la Policía de Amambay, las amenazas que recibía Clemencio González Rodríguez se agudizaron desde el crimen a tiros de su hijo, Charles González Coronel (32), ocurrido en setiembre de 2023 en Pedro Juan Caballero.
El jefe policial mencionó que Gringo, no contaba al momento de su homicidio con ningún cargo abierto en su contra ni medidas judiciales. “Estaba en pleno uso del goce de su libertad”.
El peligroso narco de la frontera, presumiblemente era amenazado por otro referente del narcotráfico, quien habría participado en el crimen del último fin de semana, y con ello se fortalecería la hipótesis de ajuste de cuentas.
“No podemos decir que fue sicariato –por así decirlo de una manera– o un ajuste de cuentas de una persona que ha tomado armas por cuenta propia, porque a medida que va avanzando la hora puede aparecer una persona interesada o que haya realizado este hecho”, apuntó el comisario.
Mencionó además que de la escena del crimen se pudieron levantar varios indicios que se están evaluando “punto por punto”.
“Cuando realizamos investigaciones, se pudo determinar que una persona responsable estuvo en la escena y que tampoco era un hecho de sicariato exclusivamente, un ajuste de cuentas. No descartamos que es la misma escena que ocurrió con su hijo”, prosiguió Muñoz.
Gringo era uno de los líderes criminales más antiguos de Pedro Juan Caballero, vinculado al narcotráfico. Tuvo como padrino a Fahd Yamil (82); luego se habría aliado al líder del Comando Vermelho, Fernandiho Beira Mar.