Decenas de incendios asolaban el viernes el oeste de Canadá y California, en Estados Unidos, obligando a evacuar a miles de personas y reduciendo las esperanzas de que remita la letal ola de calor que castiga a la región.
Un millar de personas fueron evacuadas en la provincia canadiense de Columbia Británica, cuando un incendio forestal hizo arder la pequeña localidad de Lytton, que llevaba tres días batiendo récords nacionales de máximas temperaturas.
Ottawa estaba lista el viernes para enviar aviones militares y otras ayudas para evacuar ciudades y combatir más de 100 incendios forestales en el oeste del país por la ola de calor sin precedentes.
El primer ministro Justin Trudeau dijo que convocaría un grupo de respuesta a incidentes más tarde en la jornada y agregó que ya habló con el primer ministro de Columbia Británica, así como con alcaldes locales y jefes indígenas en comunidades amenazadas.
Según los funcionarios forestales, al menos 143 incendios estaban activos en esa provincia, la mayoría de ellos iniciados hace dos días y causados por rayos.
La canícula, que expertos dicen que se ha visto atizada por el cambio climático, deja centenares de muertos en Canadá y Estados Unidos.
Se emitieron avisos de evacuación para grandes áreas de un condado de California donde un gigantesco incendio, activo desde hace una semana, arrasó más de 8.000 hectáreas. Las imágenes de la zona mostraban colinas y áreas boscosas en llamas. Los bomberos trabajan sin descanso para sofocarlas.
En California se reportaron una docena de focos diferentes. El año pasado ese estado sufrió los peores incendios forestales de su historia.
Cientos de bomberos procuraban contener tres incendios forestales en el norte del estado, donde la sequía favoreció la expansión del fuego por miles de hectáreas. AFP