En un recorrido realizado por varias zonas de la capital, se observó una menor intensidad en las calles y también en conocidas zonas comerciales, excepto el mencionado popular centro de compras que sí tuvo la visita de muchos compradores.
Mucha gente que aún no pudo hacer sus compras durante la semana se dio cita ayer en gran cantidad en el Mercado 4, donde las ofertas principales fueron verduras y frutas a precios muy accesibles. A modo de ejemplo, la piña se vendía desde seis unidades por diez mil, el melón a dos mil guaraníes la unidad.
El choclo y la harina de maíz, queso y todos los ingredientes para el chipa guasu y la sopa paraguaya también estuvieron a la orden del día.
Uno de los comerciantes del lugar refirió que mejoró la venta en los últimos días. Indicó que lo llamativo y cuestionable fue la ausencia de efectivos policiales en el lugar, a fin de resguardar la seguridad de los feriantes y los consumidores, ante la gran cantidad de descuidistas que ya dejaron muchas víctimas.
En la zona de galerías y negocios de prendas de vestir también se vio buena movida para la tradicional renovación de vestuario de fin de año y compra de regalos para la familia.
Las vendedoras de hierbas medicinales señalaron que la venta estuvo regular para abajo en la jornada de ayer y que cayó bastante en comparación a los primeros días de la semana.
Los puestos de venta de pirotecnia que siempre tienen buena salida en víspera de la Navidad ayer no registraron mucha demanda.
VACÍOS. Por otra parte, los negocios sobre la avenida Eusebio Ayala y de la calle Palma de Asunción ayer brillaron por la ausencia de compradores.
El humor paraguayo para describir el ambiente de escasa presencia de gente lo puso uno de los vendedores de carteras de la calle Palma. Cuando le consultamos cómo estaban las ventas, respondió: “Rojapóta misa mba’e porque ndaipóri mba’eve (vamos a hacer una misa posiblemente porque no hay nada)”.
El tráfico de esta zona, que a diario solo conoce de constantes embotellamientos, ayer tuvo una jornada tranquila y de rápida circulación, al punto que sobraban espacios para estacionar.
En la zona de Eusebio Ayala también se vio una escasa presencia de compradores, excepto en algunos negocios de venta de electrodomésticos.
Similar panorama de escasa cantidad de personas se observó en los negocios sobre la calle Cerro Corá.
Este escaso movimiento obedecería a que la mayoría de la gente anticipó todas sus compras el fin de semana pasado y otros ya viajaron al interior del país para pasar las fiestas con sus familiares.