Ahora será el pleno del Máximo Tribunal el que deberá aceptar, o en su caso, rechazar la dimisión, teniendo en cuenta los antecedentes de otros juzgadores que hicieron lo mismo.
Narváez se desempeña como jueza Penal de Sentencia Nº 2 de la Circunscripción Judicial de Cordillera, luego de que por decisión del pleno, había sido enviada nuevamente al lugar donde había concursado para el cargo.
La escueta nota que presentó ante el titular del máximo tribunal de la República no señala los motivos por los cuales la misma tomó la decisión.
Narváez fue asistente fiscal, defensora pública y luego jueza, donde se desempeñaba hasta la fecha. Estuvo interinando el juzgado que dejó el juez Rubén Ayala Brun, hasta hace unos meses.
QUINTANA. La magistrada causó revuelo con la resolución que dictó concediendo la libertad al legislador Ulises Quintana, en el caso del Operativo Berilo.
La defensa de Quintana, a cargo del doctor Óscar Latorre, había requerido la revocatoria de la prisión del diputado con el argumento de que no existían elementos para mantenerlo privado de su libertad.
El lunes 8 de julio de 2019, la magistrada aceptó el pedido de la defensa del encausado y le otorgó la libertad bajo varias reglas de conducta.
Así, le impuso la comparecencia mensual ante el juzgado, prohibición de salir del país sin autorización del juzgado, prohibición de cambiar de domicilio y una fianza real de 460 millones de guaraníes y una fianza personal de su abogado por valor de 500 millones de guaraníes.
No obstante, la Fiscalía apeló el fallo. Así, el Tribunal de Apelación Penal, Primera Sala, integrada por los camaristas Pedro Mayor Martínez, Gustavo Santander y Gustavo Ocampos, resolvieron la cuestión el 25 de julio de 2019.
Anularon la resolución, y dispusieron que se realizara una nueva audiencia de revisión de medidas, cuando que la defensa había solicitado la revocatoria de la prisión.
Al final, ya a fines de noviembre, la magistrada Alicia Pedrozo confirmó la prisión preventiva del diputado, a esa altura, ya acusado por el Ministerio Público.
Incluso, el Jurado de Enjuiciamiento de Magistrados pidió un informe a raíz de su decisión. El hecho influyó, ya que la misma estaba en una terna que fue devuelta luego por el pleno de la Corte.
Posteriormente, con la elección de un nuevo juez en reemplazo del ex magistrado Rubén Ayala Brun, fue enviada de nuevo a Cordillera, donde se desempeña como jueza de Sentencia.
Ahora, es la Corte la que deberá resolver si acepta o no la renuncia, ya que hubo casos en los que no admitieron la dimisión.
Mejor oferta del estudio de Bajac
La jueza Magdalena Narváez señaló que su renuncia no se debía a ningún problema con la Corte, sino que se le presentó una mejor oferta laboral del Estudio Jurídico del ex ministro Miguel Óscar Bajac, donde iba a mejorar sus ingresos. Dijo que habló con su familia y la apoyaron. Alegó que era una oportunidad que no podía desaprovechar. Mencionó que tenía 15 años en total en el Poder Judicial. Estuvo tres años como asistente fiscal, cuatro años como defensora pública y ocho años como jueza.