El hombre se mantuvo con la identidad falsa de un argentino, y se movilizaba por el barrio Zeballos Cué de Asunción.
Diego Alejandro Fabale solía concurrir al copetín de la mujer, donde ella lo invitaba a desayunar, hasta que, en noviembre de 2023, todo cambió.
Ese día llegó sin su canasta, presuntamente para poder llevarse las pertenencias de Estela sin peso extra, luego de asesinarla. Y así ocurrió: se apoderó de varias de sus pertenencias, entre ellas un televisor, un mantel, un teléfono celular y un tensiómetro.
¿Qué se probó en el juicio? ¿Se encontraron las evidencias en su poder? En el pódcast, todos los detalles.