Tildado de “comunista” por sus detractores, la gran duda del mercado es saber cuál Boric va a ser el que va a gobernar: el de posiciones más extremas que se mostró en primera vuelta o el más moderado que apareció de cara al balotaje.
Boric prometió impulsar un “Estado de bienestar”, en uno de los países con mayor desigualdad social.
El mayor obstáculo para avanzar con rapidez en las reformas que prometió -como el fin de las privadas Administradoras de Fondos de Pensiones, un sistema universal de salud y 500.000 nuevos empleos para mujeres, entre otras-, es la composición del Congreso, dividido en partes iguales entre partidos de izquierda y de derecha.
“Gobernar será muy, muy difícil”, dijo a la AFP Michael Shifter, del centro de análisis Diálogo Interamericano en Washington. AFP