La última vez que sucedió algo similar fue en diciembre de 1918, cuando el obispo Juan Sinforiano Bogarín decidió una medida similar, ante la llegada de la gripe española.
Lo que ocurrió en el primer fin de semana, al inicio del novenario, encendió la preocupación, cuando cientos de peregrinos llegaron de cualquier manera hasta el Santuario de la Virgen, agolpándose sin cumplir con las debidas recomendaciones de protección sanitaria, como el uso de mascarillas y el necesario distanciamiento físico. Las escenas de muchas personas agolpadas ante el Ykua de la Virgen, despertó la alarma. El efecto se sintió después en un considerable aumento de casos de contagio en la región y el colapso de las instalaciones de Urgencia y Terapias en el Hospital Regional de Cordillera.
Tras la aplicación de medidas más drásticas, como el vallado de las calles alrededor de la Basílica, un control policial más estricto para desalentar a los peregrinos y el cierre total de los comercios no esenciales en el centro de Caacupé, desde el 4 al 9 de diciembre, la concurrencia de fieles se redujo notablemente. También se ha dispuesto prohibir la circulación en horas nocturnas. A nivel nacional, una nueva disposición restringe la venta de bebidas alcohólicas de 22.00 a 5.00, en todos los lugares, excepto en los locales gastronómicos y bares
Aun así, existe preocupación por lo que pueda ocurrir en la festividad central, desde la víspera del 7 de diciembre y principalmente en la celebración del Tupãsy Ára, el día 8, que tradicionalmente son los días en que miles de personas se vuelcan a la llamada Capital Espiritual del país.
Para desalentar la concurrencia física, las misas y celebraciones se están haciendo a puertas cerradas en la Basílica y ni siquiera se han instalado los habituales parlantes para seguir los oficios desde afuera.
Por el contrario, todo se transmite a través de los canales de televisión y por redes sociales en internet, para que este año los fieles puedan seguir las celebraciones desde casa, sin poner en riesgo su propia salud ni la de los demás.
Los medios de comunicación han dispuesto una cobertura especial en modo Covid, para que las personas puedan participar desde el lugar en que se encuentren.
En el caso de nuestro diario, estamos incluyendo páginas especiales en nuestra edición impresa, como la provisión permanente de noticias y reportajes especiales en nuestra edición digital, en conexión con los demás medios del Grupo Multimedia, entre ellos los canales Telefuturo, Noticias Paraguay y la emisora Monumental AM.
De modo que no hay razones para ir este año a Caacupé. La Iglesia Católica Paraguaya ha dispuesto que el pago de las promesas hechas a la Virgen está dispensado o se puede cumplir a distancia. Lo importante es preservar la salud de cada uno y la de los seres queridos.