El juez penal de Garantías Rubén Riquelme y la jueza penal de Garantías Rosarito Montanía otorgaron el arresto domiciliario a Marcos Gómez da Silva, de nacionalidad brasileña, imputado por violencia familiar. Este hecho punible, sin embargo, está considerado como crimen, por lo que no se puede otorgar una medida menos gravosa que la prisión, según explicó el abogado querellante Álvaro Rojas.
La Cámara de Apelaciones, Primera Sala, revocó la resolución de la jueza y dispuso la prisión preventiva en el penal de Tacumbú. El hombre se presentó ante el Departamento Judicial de la Policía, donde quedó detenido.
El fiscal Joan Paul López imputó a Gómez por violencia familiar, en marzo pasado, tras encontrarse indicios de que supuestamente golpeaba a su esposa. Riquelme le dio el arresto domiciliario el 4 de abril de 2018 y posteriormente Montanía ratificó dicha medida el 10 de octubre pasado, por lo que el querellante apeló la resolución.
Finalmente, el representante del Ministerio Público contestó a los camaristas que se admita la apelación presentada y se decrete la prisión de Gómez Silva. Para el próximo lunes está fijada la audiencia preliminar de Gómez, donde se debe decidir si afronta o no juicio oral por el hecho punible referido.
EL CASO. La mujer, en compañía de su abogado, denunció ante la Comisaría 10ª Metropolitana, en diciembre del año pasado, que era golpeada constantemente. También ante el Juzgado de Paz. Este último resolvió que el denunciante no se acerque a la mujer, pero este incumplió, por lo que se presentó una denuncia por desacato.