Irán anunció este lunes que superó el límite autorizado de sus reservas de uranio poco enriquecido, impuesto por el acuerdo de 2015 sobre su programa nuclear, arriesgándose a ser acusado por primera vez de incumplir sus compromisos internacionales.
Rusia lamentó la decisión, pero afirmó que era consecuencia de la presión estadounidense, y Gran Bretaña, muy inquieta, instó a Irán a no dar otro paso fuera del acuerdo. El anuncio se produce en medio de tensiones exacerbadas con Estados Unidos, haciendo temer un conflicto en la región del Golfo.
La crisis entre ambos países aumentó el 20 de junio luego de que Irán derribara un dron estadounidense. Según Teherán, el aparato había violado su espacio aéreo, Washington lo negó.
El Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA, dependiente de ONU), encargado de verificar la aplicación por Teherán del acuerdo, confirmó este lunes que Irán excedió el límite impuesto.
Ni la OIEA ni Zarif precisaron hasta qué punto más allá de los 300 kilos habían llegado las reservas.
El ministro de Relaciones Exteriores británico, Jeremy Hunt, destacó que Londres está “profundamente preocupado”, e instó a Irán “a evitar dar cualquier otro paso fuera del acuerdo histórico”.
Entretanto el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, reclamó a Europa que aplique sanciones a Teherán. AFP