14 feb. 2025

Industrias garantizan solo hasta junio molienda de soja

Debido a la merma de la producción de granos, las empresas que procesan soja sufrirán un desabastecimiento y podrían paralizar sus actividades en el segundo semestre del año. El sector estima que la operatividad no llegará ni a la mitad de los 2,8 millones de toneladas, registradas en el 2021, cuando tampoco hubo un buen comportamiento en volúmenes.

Si bien el primer efecto de la pérdida de los rendimientos, como consecuencia de la sequía, impacta inmediatamente en los agricultores, la situación afecta a toda la cadena de valor, entre proveedores, camioneros, exportadores, importadores de insumos y a las industrias.

Sobre el último punto, la Cámara Paraguaya de Procesadores de Oleaginosas y Cereales (Cappro) considera que se agrava la crisis en un sector que viene arrastrando cifras negativas en los volúmenes transformados en aceite y harina principalmente.

“Este sería el tercer año consecutivo en que el porcentaje de molienda cayó. Entonces, con estos valores de disponibilidad de materia prima, obviamente estamos ante una crisis porque no creo que lleguemos ni a la mitad de lo que procesamos el año pasado”, dijo la gerente del gremio, Sandra Noguera. Se refirió a los 2,8 millones de toneladas de soja que ingresaron a las fábricas en el 2021 y que significó una reducción del 15% respecto al año anterior.

PRONÓSTICOS. De acuerdo con estimaciones que dijo Noguera, la disponibilidad de granos de la campaña 2021-2022 alcanzaría 4 millones de toneladas de los 10,5 millones que se esperaban inicialmente. Como gran parte del volumen se exporta en estado natural, la tendencia es que haya poca oferta para la industria. “A partir de junio posiblemente vamos a estar parados todos, en el caso de que no tengamos importación y por tanto materia prima”, advirtió la representante de las fábricas.

ALTERNATIVAS. Hasta el momento, la Cappro presentó dos propuestas para mitigar el impacto, especialmente en el empleo, donde las empresas asociadas son responsables de 2.200 trabajadores.

Sobre este aspecto, el gremio solicitó su inclusión junto a los sectores de la gastronomía, hotelería, turismo, eventos y entretenimientos en el proyecto de ley que prorroga por un año el régimen transitorio de pagos al Instituto de Previsión Social. De esta manera, estiman que el aporte patronal por seguridad social, que es del 16,5%, pasaría a 2,5% este año con el compromiso de pagar lo que falta en el 2023.

En paralelo, pretenden un régimen de importación temporal, que permitirá ingresar granos desde el exterior con ventajas arancelarias, con la condición de procesar en su totalidad para exportarlos con valor agregado.

En este sentido, el Gobierno se mostró abierto a las negociaciones y todo apunta a que se llegará a un acuerdo. Sin embargo, otro proceso es cerrar negocios con los países productores de la región, ya que están atravesando la misma situación que afecta a Paraguay.

En caso de que las industrias dejen de operar, la Cappro también contempla un arreglo con la Administración Nacional de Electricidad (ANDE), debido a que no se utilizará la potencia reservada habitual.