Pasadas las 20:30, Cristaldo iba como acompañante en una motocicleta por un camino vecinal de la colonia Vaka Hû, junto a su sobrino Bartolomé Cristaldo, que conducía el biciclo.
En un tramo del camino, por extrañas circunstancias, pararon la marcha en medio de la oscuridad y en un lugar despoblado, cuando se acercaron dos hombres, también en motocicleta; uno de ellos sacó un arma y comenzó a disparar.
De forma llamativa, los disparos solo alcanzaron a Eladio, quien cayó tendido al suelo, mientras que su sobrino no recibió ni siquiera un refilón de bala y salió ileso del ataque.
Luego del hecho, llegaron agentes del Departamento de Criminalística y de la Fiscalía para realizar los procedimientos. Los expertos determinaron que el fallecido recibió 28 tiros de arma de fuego en distintas partes del cuerpo.
El fiscal Rolando Ortega, designado para investigar el caso, explicó que están realizando varias diligencias para esclarecer el hecho. “Esta visto como un ajuste de cuenta. No tenemos indicios de algún tipo de robo u otros hechos”, explicó.
Los investigadores manejan varias hipótesis y no se puede descartar ninguna de ellas, según explicó el fiscal Ortega.
El fallecido tiene denuncias por abigeato y otros delitos, explicaron fuentes investigativas.
CAÍDA DE DROGA. En un principio se manejó la información que el caso tendría que ver con la caída de un cargamento de 410 kilos de cocaína, que se produjo en un establecimiento rural de Santaní, el pasado 3 de enero.
Sin embargo, el fiscal del caso reveló que esa versión, por el momento está descartada. “El fallecido estaba residiendo en España y volvió hace 22 días. Es prematuro hablar del trasfondo, pero estamos haciendo las averiguaciones”, agregó el agente del Ministerio Público.
El que está en la mira de los que llevan adelante las pesquisas es el sobrino del fallecido, quien dio una extraña explicación a los intervinientes.
El hombre afirmó que circulaba en motocicleta con su tío, pero que en un tramo, el biciclo comenzó a andar con dificultad ante supuestos desperfectos mecánicos.
Por este motivo, relató, que tuvo que parar al lado del camino, justo en el momento en que llegaron los atacantes.
El fiscal Ortega ordenó que la moto sea peritada por expertos para determinar si tuvo algún desperfecto.
Industria
El sicariato se convirtió en una modalidad utilizada frecuentemente en el crimen organizado para el ajuste de cuentas. La industria del sicariato comenzó en el Departamento de Amambay, donde se dan la mayoría de los casos, pero en los últimos tiempos, el negocio comenzó a migrar hacia otros lugares. Este año se dieron casos en Pedro Juan Caballero. Uno de los más sonados fue el asesinato del policía Fredy Díaz, ocurrido el último miércoles. El pasado 8 de enero, en Guarambaré, mataron al joven Enrique Silgueira en plena calle.